Los ramos de flores, los peluches y chocolates salen muy baratos al lado de lo que cuesta un corazón roto. ¿Sabes cuánto ganaron artistas como Amy Winehouse y Adele por escribirle al desamor?
Por Karla Trejo
RegeneraciónMx, 13 de febrero de 2022.- El amor no vende más que el desamor, y la prueba está en que la derrama económica que deja el Día del Amor y la Amistad no tiene punto de comparación con las ganancias que deja el dolor. Grandes estrellas de la música y otras artes se hicieron gracias a un corazón roto. Para muestra basta y botón… o este texto.
Según la Cámara de Comercio de la Ciudad de México (Canaco CDMX), este 14 de febrero –Día de San Valentín–, los mexicanos dejarán una derrama económica de hasta 3 mil 104 millones de pesos en flores, chocolates, peluches, cenas románticas y otros regalos para celebrar la dicha amorosa.
Sin embargo, dicha cantidad se convierte en un pelo de gato al lado del dinero que ganó la cantante británica Adele cuando vendió más de 8.7 millones de copias de su desgarrador tema Rolling in the deep (2011) tan solo en Estados Unidos, y por el que fue premiada con certificaciones de oro y diamante, premios MTV, UK Video Awards, Q Awards y tres Grammy.
Según la historia que la misma Adele ha contado a algunos medios, Rolling in the deep, que además la dio a conocer mundialmente, fue escrita tras su ruptura amorosa con el fotógrafo Alex Sturrock en 2009. Sí, esta canción narra el dolor de la cantante cuando su novio la insultó durante una discusión y terminó su relación con ella. El desamor vendió más.
Y no es la única canción así, pues la británica repitió la fórmula coescribiendo Someone like you y Hello, ambas fuentes de dolor, desamor, decepción y todo eso que sale de un corazón roto. Las tres han conseguido todas las cimas en el mundo de la música y, seguramente, han superado en ganancias cualquier costo de anillos de compromiso, bodas o viajes de enamorados.
Decenas, cientos de famosos han alcanzado conseguido grandes fortunas gracias al dolor. Otro ejemplo son las canciones Don’t speak y Cool, escritas por la cantante Gwen Stefani e inspiradas en las fallas de su relación con Tony Kanal, quien también fue bajista de la banda No Doubt.
Y para no ir tan lejos, México tiene a sus propios exitosos del desamor. Habría que preguntarle a un mariachi en la Plaza Garibaldi si gana más cantando Por tu maldito amor o Si nos dejan. Ni hablar de ¿Cómo te va mi amor?, interpretada por las Pandora y que alcanzó fama internacional y hasta una nominación a los Grammy en 1987. O del cantautor Juan Gabriel, que sabía bien cómo desahogar las más profundas heridas.
En el género regional mexicano, el desamor, la traición y el rencor son temas fundamentales. Y vaya que este tipo de música ha ganado terreno y dinero. Grupos como Intocable, la Banda MS, la Arrolladora Banda Limón y Grupo Firme han saltado a las mieles de la fortuna con letras dolorosas.
¿O qué tal en el rock? Nadie puede negar que grupos como The Cure o Joy Division consiguieron fama por cantar una y otra vez desde el corazón roto y la tristeza. Y en México, una banda que en la década de los 2000 adquirió mucha popularidad por la misma razón –y no solo por plagio– fue Panda con su disco Para ti con desprecio, que vomitaba odio y resentimiento por una historia de amor fracasada.
Cerraré este artículo con Amy Winehouse, quien más allá de su talento (indiscutible, por cierto), dejó huella en el mundo por sus adicciones, sus heridas y sus trastornos alimenticios y emocionales, pero principalmente por su doloroso divorcio y su polémica muerte por intoxicación etílica accidental a los 27 años.
Amy Winehouse tuvo su propia catarsis y fue víctima de su propia fama con el disco Back to Black que, según ella, estaba plagado de canciones dedicadas a su exesposo, Blake Fielder. Rock, pop, jazz y soul acompañando letras realmente dolorosas, como Tears dry on their own, You know I’m no good y Wake up alone.
Sin duda, los osos de peluche y los ramos de rosas resultan muy baratos al lado del desamor que, ha dejado mucho más dinero que cualquier 14 de febrero. Y si no me crees, pregúntale a los productores de bebidas alcohólicas. “Toma tu corazón roto y conviértelo en arte” … No sabes si volarás a la fama con el alma hecha pedazos.