Pobladores de Atoluca, en Teziutlán, Puebla, rechazan ampliación de hidroeléctrica de Minera Autlán en el río Apulco
Por Leticia Ánimas
Regeneración, 19 de abril de 2015. Teziutlán, Puebla, Unos 500 habitantes de la comunidad de Atoluca en Teziutlán echaron a empleados de la Hidroeléctrica Atexcaco –perteneciente a Minera Autlán–, que invadieron terrenos ubicados en la Sección Tercera para hacer trabajos de ampliación de la generadora de energía, a pesar del rechazo de los pobladores que habitan en las cercanías del río Apulco.
El allanamiento de las propiedades, ocurrido el pasado 12 de Abril, provocó que a medio día de este domingo, se reunieran en el centro del pueblo para caminar hasta el cerro Agua Santa en el paraje Marinco donde escurren pequeños ríos cristalinos y en un acto ecuménico hacer una ofrenda en “desagravio a la madre tierra y al agua, y para agradecerle todo lo que ellas nos dan”.
“Llegaron en dos camionetas con las leyendas de Atexcaco y sin respetar el acuerdo de la comunidad que rechazó ante sus patrones la ampliación de la hidroeléctrica Atexcaco con la que quieren represar los ríos Xoloco y El Carrizal y hacer un trasvase del río Apulco, se metieron a la fuerza a los terrenos y pues eso nos hizo reunirnos para reclamarles”, indicaron entre danzas y sones.
Los empleados del Grupo Ferrominero y Minera Autlán al que pertenece la Compañía de Energía Mexicana que quiere hacer la presa, respondieron con “burlas, groserías y mentadas de madre”, al reclamo de los pobladores; pero cuando ya vieron que eran unos cinco cientos de personas reunidas, se subieron a una de sus camionetas y se fueron, dejando abandonado otro vehículo en el terreno donde pretendían tomar medidas y hacer algunos trazos. “Dicen que eran topógrafos”.
Después de la reunión del 1 de Marzo cuando ante los representantes de la empresa, una asamblea comunitaria tomó la decisión de oponerse a la obra, personal de la minera Autlán se ha acercado a los inconformes para tratar de negociar con ellos el pago de los daños por las barrenaciones que han hecho para el túnel. “Primero se ahoga el niño y luego quieren tapar el pozo”. Pero nadie ha querido recibirles nada. “Lo hicieron una segunda vez y recibieron la misma respuesta”, refirieron los vecinos.
Por eso “hace una semana, llegaron a la fuerza y se metieron a los terrenos. Pero afortunadamente la gente salió en defensa de la madre tierra y del río. La comunidad solamente los rechazó y cuando se fueron dejaron abandonada una camioneta que ya entregamos a la Dirección de Vialidad municipal”.
Los pobladores indicaron que el presidente municipal de Teziutlán Edgar Antonio Vázquez Hernández ha estado presionando al Comité de Padres de la escuela primaria “Juan Aldama” para que no presten esas instalaciones a los opositores a la hidroeléctrica “que somos todo el pueblo, aclaran. Les dijo que nomás estamos alborotando a la gente”.
Mientras que el presidente auxiliar José Cruz Reyes, y del comisariado ejidal, Juan Casanova, “que en la reunión del 1 de Marzo se comprometieron a estar con el pueblo, ahora no quieren ni tocar el tema, nomás nos dan puras evasivas”, agregaron.
Y como no es la primera vez que la empresa quiere obligarlos a aceptar el proyecto en fechas recientes “montando actos de provocación a la comunidad”, para impedir estas acciones de los corporativos a los que calificaron como “depredadores”, los pobladores han emprendido una campaña para dar información, detener y desenmascarar “las ansias ecocidas de empresas mineras e hidroeléctricas, a través de asambleas y pintas en las paredes de la comunidad”.
El cuerpo, la menta el corazón y el espíritu
Además este día caminaron hasta el pie del Cerro Agua Santa para “desagraviar” a la madre tierra y al río que son la vida de la comunidad y hacerles una ofrenda con ramos de flores, vasos y botellas con aguardiente, comida, chocolate, tabaco, hojas de papel de china, ceras blancas y amarillas, cruces de xochimakpali, copal y “hacer la oración -‘el Tloque Nahuaque’-, al que manda todo”.
“Todas las cosas tienen dueño: una cueva, un río, un monte. Ellos tienen su nacayo (su cuerpo), su ixmatialis (su mente), su tonali (su espíritu) y su yolo (corazón), aunque nosotros no lo vemos. La santísima madre tierra tiene esto. Ella recibe y da. Por eso la ofrenda no se trata nada más de venir y nada más dar como aventando las cosas, sino darlas con respeto y que la palabra sea bien dicha”.
Los habitantes de Atoluca agradecieron a la madre tierra y al agua, las maravillas de las que pueden disfrutar por tener vida y poder apreciar con “el cuerpo, la mente, el espíritu y el corazón” la inmensidad de la creación.
También pidieron fuerza para no perderse de su mandato y perdón por las acciones que la ofenden cuando se salen de su ley y su armonía.
“Fortalece mi cuerpo con el alimento/ Fortalece mi mente con la sabiduría/ Fortalece mi corazón con el afecto/ Fortalece mi espíritu con el aliento”, pidieron y que esta armonía permita dar lo mejor de cada uno a sus semejantes.
La Hidroeléctrica de Minera Autlán
De acuerdo con versiones de la filial de Minera Autlán, el proyecto se una ampliación a la planta hidroeléctrica Atexcaco utilizando el agua de los ríos Xiucayucan en Tlatlauquitepec; Puxtla en Yahonauac y Atexcaco, y Tenextitla en Hueyapan. Se construirá un túnel de 2.800 kilómetros que correrá a 80 o 100 metros bajo suelo y que llegará a un lugar conocido como La Estación.
De acuerdo con la Manifestación de Impacto Ambiental “Ampliación del Proyecto Hidroeléctrico Atexcaco” sometida a la Semarnat, la obra requiere de una inversión de 4 mil 892 millones 244 mil pesos y de 63 mil 334 metros cuadrados de terreno para su construcción que se desmontarán en su totalidad.
Los ríos a utilizarse forman parte de la Región Hidrológica Prioritaria número 76 del Río Tecolutla y las tierras son parte de la Región Terrestre Prioritaria 105 Cuetzalan, consideradas así por el papel importante que juegan en términos de la conservación de la biodiversidad.
Aunque los representantes de la empresa han dicho a los atoluquenses que la electricidad que generen no servirá a la minería, José Antonio Rivero Larrea, uno de los dueños del Grupo Ferrominero, en el acto inaugural de la hidroeléctrica Atexcaco –a la que quieren crecer-, ocurrido el 5 de octubre de 2011, aseguró que con esa planta cubrirían “el 25 % de las necesidades de electricidad del Grupo Minera Autlán”.
La Minera Autlán tiene en los municipios de Teziutlán, Hueytlalpan y Hueytamalco siete concesiones de explotación de minerales a cielo abierto. Y según informaciones de la constructora de la hidroeléctrica ya cuentan con permisos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las secretarías del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de la Defensa Nacional (Sedena), que autorizará los explosivos con los que dinamitarán el área para el túnel en “en la orillita de Atoluca”.