Mucho se habla de los tamaños de la multa y de la prohibición de contratos con la revista de Aguilar Camín pero no de la ilegalidad cometida
Regeneración, 19 septiembre de 2020. El periodista Victor Roura publicó un texto sobre el caso Nexos y hace una cronología de cómo se maneja la prensa y la política mexicana.
Roura cuenta que en 1978 Nexos prefirió ser una revista con más de lo mismo aceptando a la gente cercana a la mafia cultural. Una década después Héctor Aguilar Camín se asumió en el poder político acarreando agua de su molino personal y Nexos se consolidaría como un próspero negocio individual con una pequeña ayuda de los amigos instalados en los poderes económicos de la nación.
En agosto de 2020 la Secretaría de la Función Pública sancionó a la revista Nexos con una multa de casi un millón de pesos y dos años de inhabilitación en el acceso a publicidad por una falta administrativa detectada por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Ese mismo día Aguilar Camín dio declaraciones enfadado y conmovido por el fallo que incurre en al menos tres imprecisiones una) Nexos no es la decana de las revistas culturales, sino ese rango lo obtiene, sin duda, la revista zacatecana Dos Filos nacida en marzo de 1974 de la mano del poeta José de Jesús Sampedro y Tierra Adentro, si bien ésta siempre ha dependido para su subsistencia de recursos públicos; dos) los anuncios no se ganan por concurso sino son adjudicados por amistad, por compadrazgo, por influencias, por órdenes superiores, por simpatía, por intereses o por conveniencia, pero nunca por reconocimiento al ejercicio periodístico; y, tres), el comunicado urgente de la revista textualmente cita: “Nexos ha sido durante cuarenta y dos años una revista independiente y crítica”, además de poseer “millones de lectores que acuden a su edición impresa”.
Lo de Nexos afecta la libertad de expresión y en el caso de Notimex es una minucia, una bastardía, una jaqueca, un airado arbitrio de un gobierno que no quiere otorgar dinero a los medios independientes y críticos.
Durante el salinato, el periódico El Financiero dejó de recibir publicidad por órdenes del presidente de la república por un ajuste de cuentas debido a la información imparcial que mantuvo el diario en las elecciones.
Ese veto salinista no tuvo que ver con faltas administrativas ni con irregularidades apócrifas, simplemente hubo un atentado a la libertad de prensa.
En 1984 cuando Victor Roura era editor de la sección cultural de La Jornada recibió un artículo de un amigo de Aguilar Camín para que fuera publicado, debido a la cantidad de información no se pudo publicar.
Transcurridas las 24 horas, incluso antes de llegar a mi oficina, la secretaria del potentado subdirector me esperaba porque a Aguilar Camín le urgía hablar conmigo.
Le cuestionó porqué no había publicado el artículo y tras indicarle que se debía publicar porque así lo quería, el texto apareció en la siguiente edición.
Esa es la pluralidad periodística del ejecutivo e Nexos, no en balde al término de ese sexenio el entonces director de La Jornada, Carlos Payán Velver “entrevistó” a Salinas de Gortari en un canal televisivo privado para agradecerle toda la generosidad que tuvo con ese diario al concederle entera libertad de expresión en un sainete orquestado para favorecer a Ernesto Zedillo, que también dejaría muchos millones de pesos a dicho periódico izquierdista, señala Roura.
En su columna, Carlos Ramírez escribió “ahora resulta que Nexos hoy aparece como una víctima de la 4T por un diferendo legal de una página de publicidad de 74,000 pesos, cuando con Salinas y Zedillo recibió no sólo millones de pesos en publicidad sino también contratos amañados, el control del Canal 22, el IFE y hasta una Subsecretaría de la SEP. A lo largo de su existencia, Nexos nunca tuvo empatía con los periodistas perseguidos y castigados por el poder presidencial priista-panista-priista de 1988 a 2018, pero sí llenó sus páginas de publicidad oficial. Peor aún, Salinas y Zedillo le dieron el control del Premio Nacional de Periodismo como instrumento de poder y reconocía sólo a los leales con el sistema priista”.
Rogelio Cardenas Sarmiento propuso a Roura como candidato para ganar el Premio Nacional de Periodismo en nombre de El Financiero pero no lo obtuvo.
Años después un intelectual le contó que había formado parte del jurado cuando él fue propuesto por el financiero y que cuando Héctor vio su nombre dijo “que Roura se iba a la chingada, descartándolo de inmediato”.
“En los hechos, Nexos no ha sido una revista de debate de ideas sino un vehículo de propaganda del modelo de modernización neoliberal salinista. Su dirigente, Héctor Aguilar Camín, fue mostrado en 1992 por Indicador Político como aviador burocrático porque siguió cobrando su pequeño sueldo en el Instituto de Estudios Históricos del Instituto Nacional de Antropología e Historia a través de su chofer. Cuando Salinas cayó en desgracia, Aguilar Camín cambió de montura al zedillismo y acuso a Raúl Salinas de… ¡corrupto!, cuando Raúl fue quien le dio contratos para hacer estudios electorales. Incluso, Aguilar Camín creó una nueva empresa para desviar la atención de Nexos. Por cierto, un estudio sobre Michoacán de Nexos para Raúl Salinas de Gortari ayudaba al PRI y el texto fue cuestionado de manera enérgica por el politólogo Arnaldo Córdova, miembro de Nexos”, señala Carlos Ramirez.
Ana Cristina Ruelas directora de Artículo 19 señaló que el 100% del gasto público se debe destinar equitativamente. Si a la televisión le corresponde un 30 por ciento de ese total, este 30 por ciento no puede destinarse a un solo medio. Tampoco el porcentaje que se le da al medio le debe representar el 100 por ciento de sus ingresos, porque a lo mejor, como bien dices, con 30 millones de pesos se podría solucionar la vida de Transgresiones pues quizás para ti un millón de pesos signifique el 100 por ciento de tus ingresos de un año. Y eso tampoco está bien, pues el hecho de que toda tu actividad esté financiada por el Estado de alguna manera te sujeta al control del Estado, porque te deja de dar y tú desapareces.
Por eso ni Reforma, El Universal, Televisa o TV Azteca desaparecieron.
Si para Artículo 19 el dinero público debe darse de acuerdo a las necesidades de cada medio, entonces aceptaremos que negocios como Nexos o Letras Libres anden en busca del acomodamiento político para satisfacer sus particulares necesidades financieras, señala Roura.
Mucho se habla de los tamaños de la multa y de la prohibición de contratos con la revista de Aguilar Camín pero no de la ilegalidad cometida.
Nadie se refiere a las venganzas descaradas de Salinas de Gortari o de Fox Quezada contra algunas empresas que sencillamente no les simpatizaban. Acaso porque en aquellos tiempos eran situaciones “normales” amparadas por gente “crítica» como, digamos, Héctor Aguilar Camín (sanciones que no abarcaban dos años, ¡sino el sexenio entero!)…, señala Roura.
Argumentan que como estamos en otros tiempos ahora las cosas se deben apreciar de otro modo «lo del pasado ya está, o debiera estar, como subraya una y otra vez Aguilar Camín, “zanjado”, nadie debe ya volver a él».
Durante una conferencia mañanera, se dieron a conocer los nombres de las revistas, medios o periodistas beneficiados. La clase política realizaba gastos millonarios para la compra de la prensa.
Por eso los periodistas no estaban molestos ni iracundos, pues les entregaban dinero a manos llenas.
Con información de Oficio Bonito de Victor Roura en La Lupa