Lo creadores aseguran que la escultura no se inspiró en el de Nueva Yorks sino en la metáfora del toro y el oso, famosa entre los corredores de bolsa
Redacción
La Bolsa de Sao Paulo inauguró la estatua de un toro dorado frente a sus oficinas, semejante al famoso toro de bronce símbolo de Wall Street en Nueva York. El toro brasileño, hecho con fibra de vidrio y pintado de un dorado brillante, tiene casi las mismas dimensiones que la estatua neoyorquina: 5.10 metros de largo, 2 de ancho y 3 de altura.
El «Toro de Oro» en la capital económica de Brasil fue realizado en conjunto por la Bolsa paulista, el economista Pablo Spyer y el arquitecto y artista plástico Rafael Brancatelli, que diseñó la obra. Es un «toro totalmente brasileño, con una expresión representativa de la bravura y el coraje de nuestro pueblo», afirmó Brancatelli, citado por la página oficial de la bolsa paulista. Pese a las semejanzas con el famoso «Charging Bull» de Wall Street, los creadores de la estatua brasileña niegan que esté inspirada en él.
«No se inspira en el toro de Nueva York, sino en la metáfora del toro contra el oso, tradicional en el mercado financiero. Elegimos esta figura porque la asociamos a la resiliencia del inversor y del brasileño», aseguró al diario O Globo Felipe Paiva, director de Relaciones con los Clientes de la Bolsa de Sao Paulo. En la jerga bursátil, los osos simbolizan las fuerzas que empujan a la baja y el toro al alza. Los creadores del toro brasileño esperan que se torne un punto turístico en el centro de Sao Paulo, tal como ocurre con el «Charging Bull» de Wall Street, una de las obras más fotografiadas de la ciudad de Nueva York.
El famoso toro de bronce fue esculpido por el artista siciliano Arturo Di Modica (1941-2021) tras el «lunes negro» de 1987, como un regalo que honrase la «fuerza y el poder del pueblo» estadunidense. La leyenda dice que rascarle el hocico, tomarle los cuernos o los testículos trae buena suerte.