Las pasas, uvas secas, altamente nutritivas, sin embargo existen mitos de adherencia y contenido de azúcar. Y es que incluso contribuyen a menos bacterias
Regeneración, 7 de diciembre del 2019. Pasas, uvas secas. Tradicionalmente, se cree que las pasas promueven la caries dental debido a su sospecha de «pegajosidad» y contenido de azúcar.
La investigación actual identifica algunas pruebas contrarias al pensamiento tradicional, lo que sugiere que las pasas pueden no contribuir a la caries dental.
Se precisan nuevos hallazgos con respecto a las pasas y las 3 condiciones que se cree que contribuyen a la formación de caries dental.
Es decir, pH oral bajo, adherencia de los alimentos a los dientes y comportamiento de biopelículas (bacterianas).
Los estudios revisados concluyeron que la pasa:
Su consumo por sí solo no baja el pH oral por debajo del umbral que contribuye a la disolución del esmalte.
Además, no permanece en los dientes por más tiempo que otros alimentos.
Por si fuera poco, contiene una variedad de antioxidantes que inhiben Streptococcus Mutans.
Precisamente la bacteria primaria causa de caries dental.
Desde luego indican los investigadores, se debe considerar una mayor investigación en esta área.
Conozca hechos interesantes sobre las pasas de uva y las frutas secas a través de los años en la siguiente línea de tiempo.
35.000.000 AC: ¡Vitis sezonnensis! No es un estornudo sino el nombre botánico de la primera parra conocida, que florece en el sur de la región francesa. Luego, la parra evoluciona y se transforma en Vitis vinifera, que es la variedad más cultivada en la actualidad.
6000 AC: Para este entonces, se cree que el cultivo de uvas comienza en Transcaucasia (en la actualidad los países de Armenia, Azerbaiján y Georgia). También es el florecimiento de la ciruela y de la producción de ciruelas secas. Las personas parecen estar descubriendo que las frutas secas tienen un sabor y una dulzura más intensos que las frutas frescas.
4000 AC: Aproximadamente para esta época, el cultivo de la uva se expande a la región de Tigris y Éufrates (actualmente Irak). Se comienza a desecar las uvas y otras frutas cultivadas en la región, como los higos y los dátiles. (La palmera datilera es autóctona de la región, pero florece en Africa y en Arabia también).
2900 AC: Los higos se convierten en un cultivo básico de los sumerios bajo el Rey Urukagina (conocido al mismo tiempo por promover una forma de lucha en aceite entre sus subordinados. Extraño personaje).
2500 AC: ¡Hoja sagrada de higuera! Los primeros hechos bíblicos (Adán y Eva usaron las infames hojas de higuera, Noé cultivaba un viñedo) hacen referencia a las frutas que se desecaban.
2440 AC: Para este entonces, el cultivo de la uva comienza en la región delta egipcia, conmemorado en el tallado, en los mosaicos y pinturas de los templos. Los higos también lograron aprobación como alimento en toda la región del Nilo, donde eran incautados como trofeos de guerra y se utilizaban como ofrendas para los muertos.
2000 AC: ¡Bon appetit! Durante la Era de Bronce, las uvas se consumían en los hogares, como lo comprueban las semillas encontradas en las ruinas de las moradas de lo que en la actualidad es Suiza. Aproximadamente en el mismo período, los asirios comenzaron con la producción de higos.
1700 AC: “El Poema de Gilgamesh” aparece en esta época, es un rico poema que hacía mención a las uvas y a los viñedos en la antigua Sumeria, también conmemoraba las aventuras del histórico Rey de Uruk. En la actualidad se lo considera la historia escrita más antigua sobre la faz de la tierra.
1600 AC: Expansión de los higos. Se expanden más allá del Cercano Oriente, en la región mediterránea, y se radican en Creta.
1500 AC: ¿Qué comen los árabes en Las mil y una noches? Frutas secas, por supuesto. En toda la India, Persia y Arabia, la gente amplía su conocimiento sobre las frutas secas, que comienzan a aparecer en las cocinas así como en el folklore, incluso en la famosa colección de historias.
1000 AC: La Biblia lo dice. Encontramos que el primer escrito menciona las pasas de uva durante la era del Rey David (I Samuel 25:18 y 30:12, II Samuel 16:1, y I Crónicas 12:40).
900 AC: Un soldado romano o un comerciante fenicio introduce a través de Italia una nueva variedad de uva en Iberia y Africa del Norte. Es la moscatel, que probablemente se originó en Grecia y luego se hizo popular en toda Alemania y la Francia romana.
500 AC: Increíble. Las uvas secas se conocen como “pasas” (currant en inglés, deformación de “Corinto”) a medida que el cultivo avanza de Tracia a Corinto, Grecia. Allí, el dios Dionisio (luego conocido como Baco en Roma) se convierte en deidad, patrono de las viñas y del vino. Los higos obtienen popularidad como una exquisitez de la época; de hecho, alcanzan talla olímpica, son codiciados como premios en los antiguos juegos Olímpicos, sus hojas adornaban las guirnaldas que se usaban como coronas para los ganadores de las competencias.
400 AC: Los pueblos de Armenia están repletos de pasas de uva, de acuerdo con el Análisis de Jenofonte, la narración del feliz escape militar de los griegos de los brazos enemigos. Durante ese período, los higos se vuelven un artículo básico en la cocina griega, los atenienses se autodenominan “los amigos del higo”.
218-203 AC: Uno de los líderes militares más importantes en la historia, el general cartaginés Aníbal toma a los romanos desprevenidos durante la Segunda Guerra Púnica al cruzar los Alpes con tropas cuyo único alimento era nada más y nada menos que pasas de uva.
154 AC: La antigua Roma no puede obtener suficientes pasas de uva. Las pasas de uva se utilizan como premios en las competencias atléticas, pago de los impuestos, cura médica general y moneda de trueque. (Según la leyenda, dos frascos de pasas de uva podían canjearse por un niño esclavo). Los romanos festejaban con pasas de uva en proporciones bacanales.
37-29 AC: Virgil escribe sus Geórgicas, cuatro libros en latín sobre agricultura. En ellos, realza los poemas sobre las pasas de uva.
30 AC: Un motivo para morir. Destronada como Reina de Egipto, Cleopatra tiene un tipo de cobra egipcia llamada áspide que llegó a ella oculta en una canasta de higos. Según la religión egipcia, su muerte causada por la mordedura de víbora le garantizaba la inmortalidad.
77 AD: El enciclopedista romano Plinio el Viejo escribe su historia de Ciencias Naturales, 37 volúmenes de consejos prácticos como el uso y almacenaje adecuado de las uvas y el valor “curativo” de los higos. A pesar de todos sus buenos consejos, el fanatismo por el trabajo de Plinio lo lleva a una soltería permanente.
92: Se evita el exceso de uvas. La producción de uvas se vuelve tan predominante en el Imperio Romano que el Emperador Domiciano decreta que la mitad de los viñedos fuera de la península italiana debían ser arrancados de raíz.
100: El gran glotón Marco Gavio Apicio es el primer autor en el viejo mundo en escribir un libro de cocina. Incluye recetas para un pequeño suflé de pescado y carne de ternera frita, ambos con pasas de uva como ingrediente clave.
200: ¡El galo! La producción de viñedos se extiende hasta Galia (Francia) y la región del río Rin. ¿Es posible que la producción de pasas de uva sea tan antigua?
1000: Los vikingos que llegan a la costa del Labrador observan las uvas silvestres que crecen en el área, y bautizan el lugar “Vinland.”
1095-1291: Tan buenas como el oro. Durante las Cruzadas, el comercio entre Europa y otras partes del mundo aumenta drásticamente. ¿Entre los alimentos? Pasas de uva, por supuesto.
1293-1294: Prueban una y otra vez. Marco Polo exporta semillas de dátiles a India, donde su propagación es finalmente un fracaso.
1300: A medida que el comercio de pasas de uva en Europa florece, los deliciosos platos como “potaje” y “frumenty” (carnes o pescados combinados con pasas de uvas) adquieren popularidad en todo el continente.
1374: Inflación de las pasas de uva. Los precios de las pasas de uva se fueron por las nubes en Inglaterra, a 2,75 peniques por libra.
1400: Abundancia de pan con pasas de uva. En Alemania, es el pan de Navidad llamado stollen. En Italia, panettone. Y en Rusia, el pan de Pascuas adornado con pasas de uva se llama kulich.
1492: Los navegantes, incluido Cristóbal Colón, descubren que las pasas de uva son el acompañamiento perfecto para las travesías por los grandes mares, ya que se conservan en buenas condiciones por mucho tiempo. Las pasas de uva se encuentran entre las raciones de los que están a bordo de la Niña, la Pinta y la Santa María.
1513: Los españoles comienzan a importar árboles con frutas aptas para secar a las Indias Occidentales. Años más tarde, los árboles frutales llegan a México y al suroeste de Estados Unidos.
1560: ¡Higo! Los españoles introducen las primeras higueras en América del Norte a través de México.
1592: Pasas como moneda corriente: Los mercaderes de Londres solicitan a la Reina Elizabet I alquilar los servicios de la Compañía comercial de Levante, que obtiene el derecho exclusivo del comercio de las pasas.
1595: Es hora de que nos ofrezcas un poco de budín de higos. Al incorporar pan rallado, aguardiente y huevos a las pasas de uva u otras frutas secas del “frumenty,” nace el tradicional “budín de ciruelas” inglés. Más al sur, España perfecciona la producción de vinos secos y dulces a partir de las pasas de uva.
1610: Debut de “Un cuento de invierno” de Shakespeare, con menciones de un festival de esquileo de ovejas con celebración que incluye “cuatro libras de ciruelas secas, pasas de uva y sol.”
1615: Cervantes escribe la segunda parte de Don Quijote, una de las primeras novelas escritas en un idioma europeo moderno (español). En ella, hace referencia al pago de un traductor árabe con pasas de uva.
1619: Si no tienes éxito al principio. Los primeros intentos por establecer viñedos en Virginia son un fracaso, a pesar de la importación de especialistas franceses para ayudar en la industria.
1629: Los ciruelos llegan y se establecen en Nueva Inglaterra. Se arraigan como un éxito frutal.
1630: Misioneros españoles en Pueblo Senucu, próximo al actual Socorro. Nuevo México planta el primer viñedo en lo que se transforma en la Tierra del Encanto.
1649: “Cocina francesa”. Los europeos que desembarcan en Nueva Francia (que pronto se convierte en Nueva Inglaterra) observan que los nativos estadounidenses disfrutan de algo que comen con el maíz: frutas secas.
1678: ¿Quién acuñó “la comida sencilla?” Casi indiscutidamente, son Londoner y Deacon John Bunyan, quienes publican el Progreso del Peregrino este año. Es una alegoría religiosa que pregona las pasas de uva como una “comida sencilla” para los viajeros.
1683: Torta frutal festiva. Los austriacos encuentran la generosidad de la fruta del Medio Oriente cuando los turcos invaden Viena. Para celebrar su supervivencia, los vieneses sirven una rosca vienesas, o “gugelhupf”, con un relleno de pasas de uva, cáscara de limón y naranja, almendras y especias, durante la mañana de la Navidad.
1700: Surge el “Comercio triangular” , el intercambio de productos entre América, Africa y Europa. Además del azúcar, el ron y los esclavos, las pasas de uva son un producto básico en este comercio.
1736: Déjalos comer torta. El rey polaco Stanislas Lesczynska, conocido como el rey sin reino, es exiliado a Francia. Allí, crea el “baba”, un pan con pasas de uva, que se come como postre.
1754: George Washington comienza su larga residencia en el Monte Vernon, donde las pasas de uva son un clásico a la hora de la cena. Su esposa Martha prepara un “caldo de ciruelas” hecho de huesos con tuétano, pan, azúcar, pasas de uva y grosellas. Su esposo lo llama “el mayor éxito de la Sra. Washington desde nuestro matrimonio.”
1769: Botella de vino, fruto de la vid. Los misioneros españoles desembarcan en San Diego, California, con dátiles “higos Mission” y uvas maduras para desecar. Las uvas y las ciruelas autóctonas también se utilizan para hacer ciruelas secas, pasas de uva y vino sacramental.
1800: La cocina es el centro de las tareas domésticas en Estados Unidos e Inglaterra, y los libros con instrucciones de cocina imparten información de gran valor. Los libros de cocina recomiendan la inclusión de las pasas de uva en distintos platos. En la soleada cadena misionera de California, la producción de frutas prospera.
1838: El inicio de la comercialización. El ex cazador de pieles de Kentucky William Wolfskill emigra a California, y planta el primer viñedo de uvas de mesa, cerca de Los Angeles. Envía sus uvas a los mineros de oro del norte de California al precio de un “bit” (doce centavos y medio) por parra.
1861-1865: Hay escasez de huevos durante la Guerra Civil, por lo tanto las “tortas de guerra” sin huevo obtienen su sabor de las pasas de uva. Las pasas de uva también endulzan la bebida preparada para alimentar a los soldados en el campo de batalla.
1872: El productor de uvas William Thompson del Condado de Sutter, California, importa un gajo de uva sultana sin semillas del vivero Almira & Barry de Rochester, Nueva York. Su presciencia se ve recompensada cuando la sultana es la única parra que sobrevive a las inundaciones invernales repentinas.
1873: Accidente feliz. La propagación comercial de las uvas sin semillas de William Thompson comienza en California. En el condado de Fresno, una gran cantidad de arbustos se secan por accidente, dando origen al primer cultivo comercial de pasas de uva. Se lleva a San Francisco y se vende como una “exquisitez peruana”.
1875: Thompson lleva sus uvas sultanas a una competencia agrícola local. Sin conocer su nombre formal, las apoda “las Thompson sin semilla”. El apodo es bien aceptado, y las uvas sin semillas Thompson se convierten en la base de la industria de uvas y pasas de uva de California. De estas uvas con piel delgada, sin semillas y plenas de sabor, se obtienen las mejores y las más prácticas pasas de uva.
1880: A un precio de $3 a $20 el acre, la tierra económica y un clima árido fijan el marco para la gran producción de pasas de uva en California, en la región al este de Los Angeles y en el valle San Joaquín. El valle llega a ser la zona de producción más importante de todos los Estados Unidos.
1881: Los primeros armenios llegan al condado de Fresno y traen con ellos una vasta experiencia en la producción de pasas de uva. Entre otras importaciones de California podemos mencionar los higos de Esmirna, sabrosísimos, que imponen un dilema para los productores e California. Los árboles parecen sanos pero no dan frutos maduros.
1900: La producción de pasas de uva supera las fronteras del Mediterráneo y de California, llega a Australia y a Chile. La industria de higos de California ingresa en un período de medio siglo de producción pico. El viverista George Roeding soluciona el problema del higo de Esmirna introduciendo el blastofaga (avispas del higo) en el condado de Fresno. Este insecto transfiere el polen, lo que promueve una propagación y comercialización exitosa del higo de Esmirna, también conocida como el higo Calimyrna.
1900-1904: Robert Falcon Scott emprende sus expediciones a las regiones del Polo Sur. Incluye pasas de uva en sus provisiones.
1908-1909: Durante la exitosa conquista de Robert E. Peary del Polo Norte, el pemmican (brebaje nativo americano de carne y fresas desecadas, y grasa) junto con las pasas de uva lo ayudan a seguir adelante.
1914-1918: Durante la Primera Guerra Mundial, las “tortas de guerra” ganan popularidad nuevamente, junto con las tartas de “carne” picada con pasas de uva. La uva desecada también se hace popular como alimento fácil de transportar y de gran durabilidad para las tropas aliadas.
1942: Con la creciente demanda de alimentos altamente energéticos y los sustitutos de los azúcares durante la segunda Guerra Mundial, la Junta de Producción de Guerra solicita que toda la producción de uva para vino de California se utilice para pasas de uva.
1943: La producción de higos de California comienza a decaer, disminuyendo a casi la mitad (34.499 a 16.628) la superficie total cultivada, hasta 1972, año en que los higos adquieren importancia nuevamente. (En la actualidad, California se encuentra en el segundo puesto, después de Turquía, en la producción mundial de higos).
1949: Los niños que viven en la aislada ciudad de Berlín enloquecen con los paquetes de pasas de uva que arrojan los aviones que participan en el puente aéreo de Berlín. Estos aviones se hacen conocidos como los “bombarderos de pasas de uva.”
1962: El astronauta Scout Carpenter mastica una confitura tipo granola rellena con pasas de uva, y se convierte, de ese modo, en la primera persona en llevar y consumir pasas de uva en el espacio exterior.