Adolfo Efrén Tavira, ex gerente de Producción de Televisa y traficante de armas y drogas para Los Zetas, confesó que conoció de la entrega de una Suburban “atestada de maletas de dinero” para el gobernador de Coahuila, Rubén Moreira Valdez.
Regeneración, 15 de julio de 2016. En San Antonio, Texas, Adolfo Efrén Tavira testificó a favor de la Fiscalía en el juicio que se le sigue al narcotraficante mexicano Mariano Millán Vázquez, Chano. En marzo de 2011, Chano participó en los asesinatos masivos perpetrados en Piedras Negras y luego fue ascendido a jefe de plaza de esa ciudad fronteriza.
Por varias horas el ex empleado de Televisa contó al jurado su trayectoria en el crimen organizado que operaba en el norte de Coahuila.
Trabajó en la televisora de Emilio Azcárraga Jean en la que llegó a gerente de Producción, también trabajó en el departamento de Noticieros en Piedras Negras.
Según Tavira, en la información que manejaba esa empresa, borraba de las notas los nombres de narcotraficantes para que no salieran en sus noticieros. Admitió que era el responsable de hablar con otros reporteros y medios de comunicación para que hicieran lo mismo.
Por esa actividad, que realizó entre 1996 y 2000, los narcos le pagaban un sueldo y él, a su vez, se encargaba de pagar a sus colegas.
Cuando el fiscal lo cuestionó sobre la relación de Los Zetas con las autoridades de Coahuila, Tavira respondió: “Supe de unas contribuciones, exactamente no sé qué tanto dinero, pero se entregaron para el gobernador. En ese tiempo estaba Rubén Moreira”.
“Estuve presente en una entrega, pero yo me salí de ahí. Lo iban a hacer y después me dijeron que sí lo hicieron. Fue en el rancho de Beto Casas (un capo zeta de Piedras Negras)”, relató el narcotraficante.
“Sólo me dijeron que le habían entregado una Suburban con un montón de maletas llenas de dinero”, agregó.
Efrén Tavira describió también que en cuatro ocasiones compró lotes de fusiles de asalto para Los Zetas en Houston, Texas y fue responsable de coordinar a los vehículos y sus choferes que introducían cocaína a Eagle Pass.
Durante su confesión describió el asesinato de al menos 40 personas, todos amigos y conocidos del ex capo Alfonso Poncho Cuéllar, y detalló que los hermanos Miguel Ángel y Óscar Omar Treviño Morales participaron directamente en la ejecución de hombres, mujeres y menores que nada tenían que ver con el narcotráfico.
El gobierno de Moreira responde: “son mentiras”.
“Han trascendido versiones de un supuesto testigo protegido vertidas en una corte de los Estados Unidos sobre el gobernador del estado, las cuales son falsas”, aseguró la administración estatal en un comunicado oficial.
Agregó que “tan inverosímiles son dichas versiones, que notas publicadas en la red señalan que este testigo se encontraba detenido por autoridades norteamericanas durante el periodo en que él menciona que sucedieron los hechos o que según lo que ha trascendido se trataba de apoyos para una campaña electoral entregados en el 2012, cuando es de sobra conocido que la campaña a gobernador fue en el 2011”.
Y reiteró: “En forma contundente se rechaza cualquier señalamiento. Son falsedades y mentiras”.
(Con información de Proceso y del Gobierno de Coahuila)