La llamada “melcocha tóxica” contiene alta cantidad de azúcares añadidos, además de sustancias relacionadas con cáncer de pulmón, hígado y leucemia.
Regeneración, 13 de octubre 2016.- Como parte del proyecto “Fórmula Secreta” (Fó Se), impulsado por la Alianza por la Salud Alimentaria en coordinación con el artista Iván Puig, se exhibió la “melcocha tóxica”, que consta de azúcares añadidos de caña y del jarabe de maíz de alta fructuosa y aditivos y que es responsable de los graves problemas de obesidad y diabetes en México.
De acuerdo con Fiorella Espinosa, investigadora en salud alimentaria en la organización El Poder del Consumidor, “el refresco es el responsable directamente de la muerte de miles de personas en México” y destacó que este país, es el que más defunciones relacionadas con el consumo de estas bebidas presenta.
A través de la destilación de los refrescos se obtiene la “melcocha tóxica”.
Puig explicó que este proyecto busca generar conciencia entre la población mexicana sobre la escasez de medidas por parte de las autoridades responsables para regular el etiquetado de los productos ricos en azúcares, y de alta oferta en espacios públicos, así como sobre el uso de saborizantes y colorantes que son dañinos para la salud.
“Nos interesa mucho señalar la falta de regulación y la falta de responsabilidad que se ha tenido desde el Gobierno, lo cual refleja el descuido de la salud y el bienestar de la sociedad mexicana”, acusó Puig.
A principios de año, una investigación publicada en el British Medica Journal reveló que las compras de refrescos y bebidas azucaradas en México disminuyeron seis por ciento a lo largo de 2014 y llegaría hasta a un 12 por ciento para finales de 2016, esto, debido al impuesto de un peso por litro aprobado en el congreso.
Ante esto, Puig sostuvo que el proyecto “Fó Se” se desarrolla desde la perspectiva del cuerpo, la energía y el neoliberalismo. Destacó que el 90% del refresco es agua, pero el contenido tóxico es sumamente dañino y difícil de procesar por los riñones. Además, del hecho de que las empresas se apoderen del agua.
“Las principales fuentes de agua de calidad en el país ya no son públicas, están concesionadas a las empresas embotelladoras. ¿Qué pasó con el derecho fundamental de tener acceso al agua potable de buena calidad en la llave de nuestra casa?”, reclamó.
Fiorella Espinosa, recalcó que el color de la “melcocha tóxica” nos recuerda que el refresco tiene aditivos asociados con daños a la salud, como Caramelo clase III y IV, presentes principalmente en refrescos de cola que tienen sustancia 4 metillimidazole, la que está altamente relacionada con cáncer de pulmón, hígado, tiroides y leucemia.
Un refresco cuenta con 60 gramos de azúcares añadidos en 600 mililitros, es decir, 12 cucharadas cafeteras de azúcar.
Con información de Sin Embargo.