Harnecker, desde su posición insistió en la importancia de la práctica social y el protagonismo de la gente en el cambio social
Regeneración, 16 de junio del 2019. Harnecker, marxista latinoamericana ha dejado de existir. Falleció a la edad de 82 años.
Famosa por su obra «Los conceptos elementales del materialismo histórico».
La autora de más e 80 libros fue exiliada durante la dictadura de Pinochet.
La vida intelectual de Marta Harnecker esta ligada a la obra de Louis Althusser.
En vida la autora rechazó el calificativo de «estructuralismo».
Aunque todo el mundo y en las universidades se le denomine así a la corriente marxista a la cual perteneció la autora.
Leer, profundizar y no repetir como loro huasteco
La marxista planteó la centralidad de la práctica social y el protagonismo de las personas y los movimientos sociales.
La autora destaca la importancia de haberse rescatado a Marx en una época en que se señalaba estaba en desuso.
Harnecker dice que Althusser le enseñó:a
«A “leer”, a leer más allá de lo que una cita dice textualmente, a leerla en su contexto, a leer en profundidad, a deducir de lo que el autor dice, pero también de lo que no dice, su pensamiento profundo».
«Sólo de esta manera es posible que nos liberemos del dogmatismo, de la repetición de citas textuales sacadas de su contexto, y que podamos argumentar con razonamientos y no con citas».
«Sólo de esta manera se puede desarrollar creadoramente el pensamiento de Marx…»
Una marxist atenta al movimiento social.
La autora reconoce que ella no se sentía cercana al feminismo y tampoco lo había estudiado.
Reconociendo siempre que existe discriminación de la mujer, Marta dice que aprendió sobre este punto tanto de otras mujeres del movimiento social como del presidente Hugo Chávez.
Sin embargo, a partir de un cierto momento, en mis escritos empiezo incorporar temas y preocupaciones del movimiento feminista, reconoce la autora.
Al respecto comenta:
«Lo interesante es que esa evolución no se debe a un estudio de la literatura feminista sino a que los comandantes guerrilleros que yo entrevistaba en aquel momento habían sido influidos en su forma de pensar por valiosas mujeres combatientes, ellas sí imbuidas del pensamiento feminista y eso se reflejaba en sus respuestas».
«Por otra parte, más o menos una década más tarde, fue el presidente Chávez el que me enseñó, también en una forma práctica, a través de sus discursos, cuán importante era visibilizar a las mujeres en el lenguaje».
«Palabras como: hombres y mujeres, niños y niñas, compañeros y compañeras, amigas y amigos, los y las… pasaron entonces a incorporarse en mis textos».
Y ahora cuando oigo algún discurso —y especialmente esto ocurre con los dirigentes sindicales masculinos— en que no se alude a las mujeres, siento que algo falla en esos compañeros».
Un mundo a construir
La obra de la autora se puede leer en este enlace: Un mundo a Constuir
Así se denomina uno de los textos de la autora, en el cual entre otras cosas pugna por:
Poner en práctica un modelo de desarrollo que respete a la naturaleza.
En sus palabras «el gran reto: transformar los recursos naturales en una bendición y no en una maldición».
Además subraya que eso es una meta que no se puede lograr de un día para otro.
Sostiene que una sociedad ecológicamente sostenibles solo es posible con la participación popular en la defensa del medio ambiente.
Una militancia social de nuevo tipo
Entre otras cuestiones la pensadora marxista sostiene la necesidad de una militancia política que sea disciplinada.
Además respetuosa de la organización autónoma de los pueblos.
» No cuadros con mentalidad de ordeno y mando sino pedagogos populares», dice.
Burocratismo, principal flagelo a combatir
La autora no duda en decir que el burocratismo es un flagelo que hay que combatir tanto fuera como dentro de las organizaciones.
En síntesis lo que plantea es que «la crítica pública no debilita a la revolución, la fortalece».