El lugar donde se falsificaron las firmas de los servidores públicos era una casa utilizada por un funcionario de Sedesol, según la investigación.
Regeneración, 21 de febrero de 2019. Las firmas de cinco funcionarios de la Sedatu fueron falsificadas en distintos convenios con universidades, como parte de la Estafa Maestra, reporta Reforma.
De acuerdo con el diario, la rúbrica de José Antolino Orozco, titular de la Unidad de políticas Planeación y Enlace Institucional de Sedatu, fue utilizada en dos convenios con la Universidad Politécnica de Chiapas por 206 millones de pesos.
Armando Saldaña, director General de Ordenamiento Territorial habría firmado con la Universidad Politécnica de Hidalgo “Francisco I. Madero” por 187 millones de pesos.
La firma de Enrique González Tiburcio, subsecretario de Ordenamiento Territorial, también la usaron en un convenio con la universidad hidalguense por 185.8 millones de pesos.
La de José Manuel López Arroyo, coordinador de asesores del subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda fue falsificada en ampliaciones de convenios con una Universidad de Comalcalco .
Al igual que la firma de Javier Arrambide en convenios con una universidad de Quintana Roo de los que no se especificaron los montos.
La investigación periodística ubicó que uno de los presuntos «centros de falsificaciones de firmas», una casa que desde hace 10 años utiliza un ex oficial mayor de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), de Rosario Robles, Emilio Zebadúa, para distintas actividades durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.