El Jefe de jefes no le pide nada al presidente Andrés Manuel López Obrador y deseó que le vaya bien.
Regeneración, 19 de agosto del 2021. El narcotraficante Miguel Ángel Félix Gallardo, mejor conocido como El Jefe de jefes, dijo que sólo espera la muerte en el penal estatal de Puente Grande, Jalisco, y no le pide nada al presidente Andrés Manuel López Obrador. Al contrario, deseó que le vaya bien.
Durante una entrevista con Issa Osorio para Telemundo, el fundador del Cártel de
Guadalajara dijo que su salud «es pésima» y su familia, igual que él, espera su muerte; pues se encuentra en silla de ruedas y parcialmente ciego. Además, tiene neumonía y eso lo obliga a usar oxígeno para respirar.
A sus 75 años de vida no tiene esperanzas de obtener su libertad o de vivir sus últimos días fuera de prisión.
En 1989 el «Jefe de jefes» fue condenado por el asesinado de Enrique Camarena, un agente de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés). También fue acusado de acopio de armas, cohecho, delitos contra la salud y lavado de dinero.
Félix es el único de los fundadores del Cártel Guadalajara que permanece encarcelado,
ya que Ernesto Fonseca Carrillo se encuentra en prisión domiciliaria por su estado de
salud y Rafael Caro Quintero obtuvo su libertad en 2013.