Irrumpe policía con violencia en finca de director de medio de comunicación

La policía de Coahuila irrumpió en la finca “El Cielo” propiedad de Armando Castilla, director del diario local Vanguardia.

vanguardia

Regeneración, 07 de mayo 2016.-   Una treintena de elementos del grupo especial “Fuerza Coahuila” irrumpieron la madrugada de este viernes con lujo de violencia en la finca “El Clielo”, propiedad de Armando Castilla Galindo, director del diario local Vanguardia.

Con la misión de desalojar el inmueble y en cumplimiento a una orden judicial proveniente del Poder Judicial de la Ciudad de México por un supuesto adeudo.

De acuerdo con el diario, el operativo se realizó en oscuridad y de forma clandestina. Incluso, señala que los uniformados seguían las órdenes de un civil ajeno a la corporación que no ha sido identifico, mientras utilizaban maquinaria pesada.

Cual operativo contra organización criminal, los policías rompieron candados, invadieron propiedad privada e instalaron un “perímetro de seguridad” de varios kilómetros alrededor de la finca para ejecutar un presunto desalojo ordenado judicialmente.

Además, atravesaron un trascabo en el camino para impedir el paso.

Los uniformados, provocaron que un vehículo particular arrollara al director de Vanguardia, el cual, resultó lesionado.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) pidió a la Secretaría de Gobierno de Coahuila la implementación de medidas cautelares para evitar “que se ponga en riesgo la integridad personal y la seguridad física del personal del diario Vanguardia, así como de sus instalaciones y equipos”.

El Gobierno estatal se desmarcó del operativo al asegurar que la actuación de la policía fue legal y a petición de jueces de Coahuila y la Ciudad de México por un juicio hipotecario generado en 2009.

Por su parte, el diario fijó su postura respecto a los hechos ocurridos:

“No podemos ignorar que este presunto acto judicial coincide con las denuncias que hemos realizado en los últimos días para dar a conocer actos de “vigilancia” e intimidación que han sufrido miembros de nuestro personal y nuestro Director”, consignó el diario en la nota de la agresión.

“La forma en la cual se realizó la presunta diligencia judicial y, sobre todo, la actuación de los elementos policiales al mando del Secretario de Gobierno de Coahuila, Víctor Zamora Rodríguez, nos deja claro que se trata de una acción concertada que busca fines más allá del presunto cumplimiento de la ley y la defensa del estado de derecho.

“Camiones de mudanza salieron con las pertenencias del Director, hasta el momento se desconoce dónde están.

“El exceso en el uso de la fuerza implica, para nosotros, un mensaje claro: los autores intelectuales del ataque tienen en la fuerza su único argumento para imponer su ideario y lograr con ello el cumplimiento de su agenda particular”.

Además, en una nota adicional, Vanguardia reiteró que tras la alerta lanzada el pasado 4 de mayo ante una serie de ataques, intimidación y acoso a sus periodistas, pocas voces dejaron de sumarse a esta denuncia pública, y agradeció la solidaridad de otros medios de comunicación, lectores y ciudadanos.

“Al respecto, es importante puntualizar –enfatizó– que, como ha ocurrido lamentablemente en el caso de otros medios del país, en VANGUARDIA hemos procurado actuar con responsabilidad frente a las diversas situaciones que los miembros de nuestro personal, y como empresa, hemos enfrentado desde que la delincuencia organizada le impuso al país una agenda marcada por la violencia y el desafío permanente a las instituciones públicas. No realizamos señalamientos con ánimos de estridencia, ni lanzamos voces de alerta de manera gratuita. Tenemos claro que la denuncia de ataques contra la libertad de expresión debe tener como propósito no solamente visibilizar un hecho concreto, sino contribuir a la defensa de una libertad fundamental en las sociedades democráticas.

“En este sentido, la decisión de alzar la voz en esta ocasión, más que una consecuencia, fue también una acción para sumarnos a la campaña emprendida en el País para pedir freno al acoso al periodismo en todas las latitudes. Informar no es un delito y, más aún: Nuestra vida es informar.

“El último de los actos intimidatorios de una ola iniciada a finales de enero pasado, fue la persecución y acoso la noche del martes y madrugada el miércoles a una integrante de nuestro cuerpo de reporteros, justo el Día Internacional de la Libertad de Prensa. Ante esto, pocas palabras se necesitan para dejar en claro la impunidad con la que, quienes han decidido vivir fuera de los límites legales, se mueven en nuestros tiempos. Por lo mismo, callar no era una opción, pues sería tanto como contribuir a la invisible mutilación que sufre el periodismo día a día.

“Nuestra voz se suma así a la de muchos, es sólo una más tan importante como cada una de quienes firmemente seguimos construyendo para un mejor lugar. A final de cuentas, somos periodistas y nos afanamos cada día en ser buenas personas. Seguimos trabajando para que nuestra entidad sea un mejor lugar para vivir. Al final de cuentas somos periodistas que nos afanamos por hacer nuestro trabajo correctamente. Agradecemos infinitamente a todos aquellos que nos alientan a seguir siendo una pieza más en la lucha por la vida de un periodismo sin ataduras.

La CNDH solicitó medidas cautelares al secretario general de Gobierno de Coahuila, Víctor Manuel Zamora Rodríguez para evitar “que se ponga en riesgo la integridad personal y la seguridad física del personal del diario Vanguardia, así como de sus instalaciones y equipos”.

En la noche, la Secretaría de Gobierno de Coahuila se desmarcó de la actuación de la policía y justificó el desalojo al informar que el Juez Segundo de Primera Instancia en materia Civil, César Alejandro Saucedo Flores giró un oficio al encargado del Agrupamiento de la Policía de Proximidad Social de Fuerza Coahuila para auxiliar “con el uso de la fuerza pública” la realización de una diligencia.

Con información de Proceso.