La Ley del ISR reconoce como ingreso el ahorro que acumulan los trabajadores, por tanto se pierden hasta tres pesos por cada diez de lo generado durante la vida laboral.
Regeneración, 20 de mayo de 2017.- Debido a que la Ley del Impuesto sobre la Renta (ISR), no reconoce como prestación sino como ingreso el ahorro acumulado para el retiro, trabajadores en edad de jubilarse pierden hasta tres de cada 10 pesos del recurso ahorrado en su Afore.
Según Rafael Gómez Garfias, director general de orientación y asesoría al contribuyente de la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon), el ahorro no debería ser gravado con tasas tan altas que merman el recurso que recibe el trabajador.
Al momento de retirar el dinero que ahorraron durante toda la vida laboral, los trabajadores deben pagar un impuesto por disposición de la Ley del ISR, esto, como si se tratara de un ingreso más.
Gómez Garfias explicó que la misma ley prevé una exención que equivale a 6 mil pesos por año que se aportan a la su cuenta de retiro de la Afore de los empleados.
“Si el trabajador aportó 10 años, el monto máximo que está exento de pagar este impuesto es de 60 mil pesos, añadió. Si la cuenta tenía, por poner un ejemplo, 200 mil pesos, estarán exentos de pago del ISR 60 mil pesos y los otros 140 mil pesos causarán impuesto”, indicó.
Para la Prodecon, el ahorro en la afore no debería causar ISR porque es resultado de una prestación laboral y el monto exento de pago es considerado pequeño.
Por ello, el hecho de que la Ley del ISR no prevea un tratamiento especial al ahorro para el retiro, causa que la parte gravada de los recursos que retira el trabajador cause un impuesto de mínimo 20 por ciento pero que en ocasiones puede llegar a ser de hasta 30 por ciento, todo dependiendo del monto.
“Lo que la Prodecon está impugnando en tribunales es la regla de la resolución miscelánea que da al ahorro para el retiro el tratamiento de ‘otros ingresos’ y no como parte de una prestación laboral. Hemos obtenido sentencias favorables prácticamente en todos los casos que se han llevado a medio de defensa. Si bien la exención no va a ser total, pero el resultado de esto es que la tasa de impuesto que se le aplica al contribuyente es mucho más baja. Si hablamos de porcentaje, estaríamos pensando que la tasa de impuesto que pagan en el momento que retiran los fondos es de entre 20 y 30 por ciento y con el tratamiento especial que defiende la Prodecon se reduce a 5 por ciento o 10 por ciento como máximo”, añadió.
Con información de: La Jornada