Karman, premio Nobel de la Paz pide no olvidar Ayotzinapa

Nobel Tawakkol Karman «la madre de la revolución en Yemen», visitó México. Sobre Ayotzinapa: «La sociedad civil no puede dejar de investigar este delito»

Karman, premio Nobel de la Paz pide no olvidar Ayotzinapa

Regeneración, 2 de septiembre de 2022. La periodista, política, activista, luchadora feminista yemení y Premio Nobel de la Paz 2011, Tawakkol Karman, estuvo en Querétaro.

Además de relatar la lucha por la democracia en Yemen, la premio Nobel hablo del caso Ayotzinapa.

Nobel

Y es que El Financiero reseña que Karman tiene 43 años de edad, Karman y es llamada “la madre de la revolución” en Yemen.

Lo anterior en el marco del Hay Festival Querétaro 2022 en un conversatorio con la activista Alexandra Haas, actual directora de Oxfam México.

-«…, abarrotó el Teatro de la Ciudad de la capital queretana», señala el portal.

Árabe

Cabe destacar que Karman se convirtió en una figura fundamental de la Primavera Árabe por ser una de las primeras líderes mujeres en oponerse a las dictaduras no solo en su país.

“Decidí utilizar mi derecho a expresarme. Lo decidí hacer desde la trinchera del periodismo. Comencé como periodista y escribí muchos artículos en contra del dictador«, señaló la Nobel.

Además dijo que «eso fue sumamente extraño dado que era una mujer. La gente comenzó a decir: ‘¿quién es esta mujer que comenzó a tirarle a lo más alto del Estado?’».

-«Yo tenía el derecho de convocar a personas por la libre asociación y a partir de esta trinchera es que comencé mi batalla por la libertad».

Así explicó que la constitución le daba ese derecho y yo comencé a ejercerlo.

Así, relata que escribió artículos en contra del dictador y su corrupción, revelé todos los delitos que había cometido, «especialmente en la guerra y el apoyo al terrorismo dentro de Yemen”, relató.

Represión

Por otra parte narra que entre 20024 y 2005 periodistas fueron reprimidos por la administración de Saleh.

«Entonces yo pensé: ‘como periodista, ¿qué puedo hacer ahora?’, porque escribir en contra del dictador no era suficiente».

Así que «creé una organización que se llamaba Mujeres Periodistas Sin Fronteras, con la que quería convocar a mujeres dentro y fuera de Yemen».

Por otra parte, narra que cuando decidieron revocar la licencia de esta organización y, bueno, decidí crear una nueva que se llama Mujeres Periodistas sin Cadenas.

-“La gente me llama ‘la madre de la revolución’ porque en este periodo alenté al pueblo de Yemen a decir no a las injusticias, a levantar la voz y a utilizar los movimientos pacíficos”.

Mejor que morir por nada

Asimismo el portal detalla que desde que ganó el Nobel de la Paz en 2011, no ha querido cambiar el tono de su discurso.

Esto, a pesar de que le han pedido que modere el tono ahora que es una portavoz de la paz.

-“Pero les he respondido que no, que esa no soy yo. Soy yo a quien los dictadores consideran su enemiga, porque ellos son los enemigos de la justicia y de la libertad».

Al tiempo que agrega: «…, y yo soy un símbolo de la igualdad y de la democracia, así que jamás voy a bajar la voz (…)»

-«…, mi mayor temor no es morir, es no ser capaz de convencer a los países de dejar de apoyar a los dictadores. Si he de morir por una causa noble, es mejor que morir por nada”.

Ayotzinapa

Además la Nobel fue interrogada sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

-“…, he escuchado un poco de lo que pasó y lo que puedo decir es que la sociedad civil no puede dejar de investigar este delito ni cualquier otro».

Seguidamente dijo que la sociedad civil y también los medios tienen la gran responsabilidad de descubrir la verdad.

-«No se den por vencidos, si no queda claro quién cometió este crimen, no deben esperar. Ustedes deben hacerse de maneras para que este caso y otros permanezcan vivos», aseveró.

Finalmente la Nobel sentenció: «No dejen que se olviden, no permitan que la verdad desaparezca. Esa es su obligación como sociedad civil”.