La cibervigilancia, clave en el espionaje contra periodistas

The Cartel Project denuncia la colusión entre los cárteles de la droga y las autoridades en el espionaje a periodistas

Regeneración a 8 diciembre de 2020. The Cartel Project es una colaboración del consorcio Forbidden Stories en el que participaron 60 periodistas de 25 organizaciones y medios de 18 países.

Dicho colectivo denuncia la colusión entre los cárteles de la droga y las autoridades.

En el proyecto participaron medios como el The Washington Post, The Guardian, El País, Süddeutsche ZeitungLe MondeProceso.

Tiene como objetivo «seguir las historias de sus colegas asesinados» en México.

Además, «investigar las redes globales de los cárteles de la droga mexicanos y sus conexiones políticas en todo el mundo«.

Periodistas espiados 

Una de las cinco investigaciones del proyecto se relaciona con la periodista Regina Martínez quien fue asesinada el 8 de diciembre de 2021 en Xalapa.

Miembros de The Cartel Project aseguraron que Martínez investigaba «los vínculos entre políticos y narcotraficantes en el estado de Veracruz».

Dicho esto es una verdadera unidad de espionaje liderada por el Ministerio de Seguridad Pública que se creó en la década de los noventa.

Un alto funcionario que trabajaba para los gobernadores de la época señaló que, la unidad utilizó técnicas de inteligencia convencionales y mantuvo archivos personales de periodistas.

Gobierno 

Entre 2017 y 2019, la unidad adquirió tecnologías de vanguardia provenientes de Europa.

De acuerdo con los correos electrónicos de la empresa Hacking Team, Veracruz tenía acceso a una versión de prueba de RCS.

Para 2018, el gobernador anunció el cese de las actividades de espionaje, sin saber que se trató de una sispensión o un desmantelamiento permanente.

De acuerdo con un alto funcionario de la DEA, cerca de 20 empresas privadas de software espía han vendido su software a varios departamentos de policía federales y estatales en México.

Pegasus

Uno de los casos más sonados sobre espionaje fue Pegasus, software vendido por la empresa israelí NSO Group.

Jorge Carrasco es uno de los nueve periodistas cuyos teléfonos mostraban evidencia del ataque de este software espía.

Tras descubrir este software, Forbidden Stories contactó a la empresa NSO quien afirmó «investigar a fondo cualquier alegación creíble de uso indebido, incluidas las afirmaciones de que [su] tecnología se ha utilizado para fines distintos a los casos legítimos de prevención «investigación de actos de terrorismo u otros delitos«. 

Diversas asociaciones se unieron a los periodistas atacados por Pegasus para presentar una denuncia; sin embargo, la fiscalía exige la recuperación de los teléfonos afectados por la infección para avanzar en la investigación.

Influencia y corrupción

En México, mayoría de los contratos de cibervigilancia se firman sin licitación y sin la más mínima transparencia lo que los vuelve propensos a la corrupción.

El israelí Uri Emmanuel Ansbacher es propietario de una galaxia de empresas en México, además es amigo del director del Grupo NSO, Shalev Hulio quien es intermediario de varias empresas israelíes de cibervigilancia.

Algunos de los intermediario son Neolinx de México y Sym Servicios que aún siguen activos, pues con la ayuda de un grupo de expertos C4ADS se demostró que estos todavía estaban importando equipos de empresas israelíes en 2019.