Es imposible ahogar una guerra con más guerras, dijo el presidente de Uruguay, José Mujica, acerca de la intención de EE.UU. de realizar un ataque militar contra Siria.
Expresando su punto de vista en una cadena de radio local, Mujica dijo que «el único bombardeo que vemos admisible en Siria es con leche en polvo, con galletas y con comida, no armas ni bombas».
Explicó el mandatario, «La guerra no se resuelve introduciendo más guerra presuntamente más justa, sino que se desemboca en un camino lleno de conflictos interminables y se asegura un hondo resentimiento que se va a transformar en lucha y resistencia de por aquí y por allá», indicó Mujica.
Analizando la historia mundial y acentuando los recientes hitos de la historia contemporánea, el presidente uruguayo instó a recordar las consecuencias de todas las guerras. «Cada uno de los intentos de los últimos 20 o 30 años por imponer la democracia occidental a cañonazos, allí en la Asia menor o en el mundo árabe, el resultado final de semejante sacrificio son dolorosos genocidios», precisó el líder uruguayo.
A él le parece que la guerra como solución solo sirve para mantener al hombre en su prehistoria. Los que van a ganar son los especuladores, indicó el mandatario: «Ni lentos ni perezosos los intereses de especulación financiera van a estar al golpe del balde, aprovechando los sustos en una zona de guerra».
Lo único que pueden hacer los países acerca de Siria es «discutir y discutir y tranzar y negociar, cualquier negociación por mala que sea es infinitamente mejor para los débiles, los pobres y para los que padecen en el mundo cualquier solución militar», concluyó el mandatario.