La reforma energética promueve ecocidio con el fracking o fractura hidráulica

La fractura hidráulica será devastadora para el medio ambiente, los derechos humanos y la disponibilidad de agua.

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 Regeneración, 7 de junio de 2014. La llamada reforma energética promueve un método de extracción de gas y petróleo llamado fractura hidráulica o fracking, que será devastador para el medio ambiente, contaminará las reservas de agua del país y provocará violaciones a los derechos humanos de los mexicanos. Estas son las conclusiones del libro “Impacto social y ambiental del fracking”, presentado esta semana en el Senado de la República.

La extracción del gas shale, a través del fracking sería “devastador” para el medio ambiente, y por ello este método ha sido prohibido en algunas naciones de Europa con Francia y en estados de la Unión Americana, advirtieron ambientalistas y legisladores que se oponen a que esta técnica se generalice en nuestro país.
La reforma energética que propone Peña Nieto y que promueven el PRI y el PAN promueve el fracking como “la gran solución” para atraer capitales extranjeros, pero por sus consecuencias sociales y ambientales para los mexicanos debe ser prohibido el fracking en nuestro país y proteger al medio ambiente.
La reforma energética impulsa el saqueo de nuestra riqueza, una especie de fiebre del oro negro y del gas no convencional, para extraer el patrimonio de la nación, comercializarlo y llevárselo, dejando contaminación y pobreza. Es un negocio muy malo para el país.

No-al-Fracking

El fracking no es rentable, es un ecocidio

Esa técnica no es rentable advirtió Areli Sandoval Terán, a nombre de la Alianza Mexicana Contra el Fracking. En un año los pozos declinan a más de la mitad y apenas se recupera 10% del hidrocarburo liberado por la fractura hidráulica, por lo que el resto del combustible contamina la tierra y el agua del subsuelo.

El gasto de agua lo hace inviable, dijo Sandoval, pues cada pozo puede llegar a utilizar en un año hasta 80 millones de litros de agua, contaminando el subsuelo y los mantos freáticos. En México falta agua, si la usamos para extraer petróleo y gas shale se dejará sin agua a varias regiones del país.  Aseveró que la aplicación de este método propiciará una serie de violaciones a los derechos humanos, al dañar el medio ambiente, contaminar el agua y despojar a las comunidades de sus tierras.

Según estimaciones de senadores del PAN que promueven este método, podrían abrirse en México 20 mil pozos en los próximos dos años.

El secretario de la Comisión de Energía, el senador del PRD, Rabindranath Salazar Solorio, dijo que son muchos los signos de alerta alrededor del mundo, sobre esta práctica depredadora del medio ambiente y de la salud, por lo que en México se debería reflexionar al respecto para no cometer los mismos errores en prejuicio de la población.
Informó que la bancada de su partido planteará, en la discusión de la reforma energética, que se prohíba la técnica del fracking en el país, o en su caso, establecer una moratoria de 15 años, para hacer estudios, a fin de verificar y demostrar científicamente cómo se dan este tipo de afectaciones.
Por ello, pidió al Poder Legislativo comprometerse con la población mexicana y poner freno a la pretensión de legalizar el fracking, asegurar un debate amplio y abierto a la participación de la sociedad durante la discusión de las leyes secundarias.