Denuncia por millones de partículas de plástico, aluminio y 12 tanque propulsores de cohete Starship en Matamoros. Hogar de la tortuga lora
Regeneración, 3 de junio de 2025. En redes destacan el hallazgo de restos metálicos en Playa Bagdad, en Matamoros, Tamaulipas pertenecientes al cohete Starship de la empresa SpaceX.
Por ello, la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (SEDUMA), presentará una denuncia formal ante las autoridades federales.
Esto, con el propósito de que se lleve a cabo una investigación que permita determinar el origen y la peligrosidad de dichos objetos.
SpaceX
Y es que se narra que el cohete fue lanzado el 27 de mayo desde Boca Chica, Texas lo que generó que millones de partículas de basura.
Así como 12 tanques de 4 mil 500 libras, que forman parte del propulsor de la nave, cayeran en Playa Bagdad.
Seguidamente se subraya que integrantes de Conibio Global AC lanzaron una alerta para que las autoridades tomen cartas en el asunto.
Subrayan que todo ello a fin de evitar un desastre ecológico ya que esta playa es hogar de la tortuga lora.
Sedema
Cabe destacar que La titular de la SEDUMA, Karina Lizeth Saldívar Lartigue, explicó que el requerimiento será presentado por Procuraduría Ambiental de Tamaulipas ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA).
“Como autoridad estatal, estamos coadyuvando con las instancias federales competentes para que este hecho sea atendido con responsabilidad y conforme al marco legal».
«No podemos permanecer ajenos a una situación que representa un potencial riesgo para el entorno costero y la seguridad de la población”.
Como se sabe el asunto es federal debido a que se trata de aguas jurisdiccionales y materiales clasificados como peligrosos.
Por ello, el Gobierno de Tamaulipas mantiene una comunicación constante con PROFEPA para dar seguimiento puntual al caso.
Riego
Saldívar Lartigue exhortó a la ciudadanía a no exponerse a riesgos en caso de encontrar este tipo de objetos en las playas de Tamaulipas.
Además, invitó a la población a reportar cualquier hallazgo a través del número de emergencias 911.
Cabe destacar que se trata de millones de restos pedazos de plástico y aluminio, provenientes del cohete Starship de SpaceX, han comenzado a llegar a Playa Bagdad, en Matamoros.
Y es que como se sabe el cohete hizo explosión en el Golfo de México.
Al tiempo que se indica que integrantes de Conibio Global A.C. han recorrido la costa y documentaron la presencia de estos residuos a lo largo de 40 kilómetros de playa.
Este desastre “representa un riesgo máximo de daño ecológico para el ecosistema marino y las especies que lo habitan”.
Así lo advirtió Jesús Elías Ibarra Rodríguez, quien forma parte de la asociación.
Lo más grave es que estos residuos flotan o se entierran en la arena, justo cuando se aproxima el nacimiento de cientos de tortugas lora, una especie ya en peligro de extinción.
SpaceX y tortugas
“La llegada de estos residuos pone en peligro a las tortugas loras, una especie en peligro de extinción, y a las familias pescadoras de la región”.
Por si fuera poco, también hay tanques metálicos de gran tamaño esparcidos en el mar, parte de los restos SpaceX Starship en Matamoros.
Los cuales además podrían convertirse en un riesgo para las embarcaciones locales.
“Esto pone en alto riesgo a todo el ecosistema marino, genera un impacto negativo en las familias pescadoras, y representa un peligro para embarcaciones que podrían colisionar con los tanques dispersos en el mar”.
La organización ya solicitó a la titular de PROFEPA, Mariana Boy, que eleve el caso a instancias internacionales y exija a SpaceX responder por los daños ambientales.
Seguidamente se subraya que la preocupación crece, pues los nacimientos de tortuga están a la vuelta de la esquina. Y en vez de encontrar arena limpia, podrían toparse con basura peligrosa.
“Se tendrán que liberar en playas contaminadas con basura que pueden ingerir, confundiéndola con alimento”.
Cohete en problemas
Por otra parte, se destaca que se trata de un elemento inesperado que le está provocando un serio problema en el proceso de fin de vida útil de sus 7 mil satélites.
Cuando los Starlink han cumplido su misión de unos cinco años, los aparatos inician una reentrada gradual hacia la atmósfera que dura unos 15 días.
Así, durante este tiempo, la fricción los va desintegrando hasta desaparecer, y lo que no desaparece (cerca de un 5%), se puede dirigir hacia mar abierto, según documentos de SpaceX.
Sin embargo, esto ahora no está sucediendo, ya que las tormentas solares están provocando que los satélites entren más rápido en la atmósfera.
Por ello, les cueste más desintegrarse, con lo que algunas partes están cayendo descontroladamente a la superficie de la tierra, poniendo en peligro la integridad de la población.
Se han llegado a encontrar fragmentos de hasta 2 kilos y medio, según reconoció la propia SpaceX.
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