Luisa María Alcalde, representante de la juventud del MORENA, habló en el Auditorio Nacional de esta realidad y abogó por incorporar también “a los jóvenes de las zonas rurales del México profundo, porque el sistema educativo oficial los ha desvinculado de su tierra, del lugar que los ha visto nacer al desarraigarlos del campo. La formación que se les ofrece desvaloriza su cultura y sus costumbres”.
“No es casual que la delincuencia organizada cuente con un ejército de reserva formado por jóvenes excluidos de su derecho a la educación y al trabajo digno; personas, que en su mayoría han vivido experiencias terribles de violencia en sus hogares, de pobreza, marginación y falta de oportunidades”, subrayó la joven recién egresada de la UNAM.
La juventud en el mundo no se conforma con lo que le ha tocado vivir. De Egipto a Chile, de Estados Unidos a China, se movilizan los jóvenes, ponen a prueba gobiernos autoritarios, alzan su voz indignada y se organizan contra las políticas que generan exclusión, pobreza, desigualdad y violencia.
En la lucha por el cambio político, económico, social, ambiental y cultural, es fundamental la fuerza rebelde y creativa de la juventud.
Cada día hay más jóvenes que se unen al movimiento por la transformación de México, señaló Luisa Alcalde. El movimiento, agregó, “es un espacio ciudadano en el que se está gestando el cambio… formado por personas que tienen en común el deseo de hacer de México un lugar más justo, con menos desigualdad, en el que dará gusto vivir y orgullo pertenecer. El potencial que nos da la unidad será la clave para lograrlo”.
La dirigente juvenil, invitó a los jóvenes a votar el próximo año por el cambio, “pero eso no es suficiente hay que organizarse. Queremos ser nosotros los que construyamos nuestro propio destino. Simplemente, porque estamos seguros, que un México mejor, sí es posible”.
Foto por Ricardo Flores A.