Regeneración, 15 de diciembre 2015.- A tan solo unos días de haber asumido la presidencia, Mauricio Macri ya provocó su primer escándalo al imponer por decreto a dos jueces en la Corte Suprema de Justicia, rompiendo así como su promesa de respetar la institucionalidad y la separación de poderes.
En contraste con la campaña que le permitió derrotar el kirchnerismo, que se basaba en criticar su “avasallamiento” sobre las instituciones, Macri tomó la primera decisión polémica de su mandato, imponiendo a Horacio Rosatti y Carlos Roesenkrantz.
Hasta el momento la Corte operaba con tres jueces ya que los otros dos habían muerto o renunciado, sin embargo, el proceso normal otorga a Macri el poder de proponer a los candidatos, siendo el Senado quien autoriza o rechaza.
Parra Daniel Sabsay, abogado constitucionalista y acérrimo crítico de Fernández de Kirchner “ni siquiera a ella se le ocurrió algo tan disparato” aseguró, mientras recordaba que el último designio presidencial de jueces fue en 1852.
Por su parte el exministro de Justicia, Ricardo Gil Laavedra, consideró que “es una equivocación, un error grave, y sienta un precedente muy funesto, muy malo, porque cualquier presidente podría durante el receso nombrar jueces, y al año siguiente, durante otro receso, podría volver a nombrarlo, y así tendría jueces suyos todo el tiempo”.
Con información de Aristegui Noticias.