Durante la administración de Miguel Ángel Mancera, el encubrimiento de violaciones a los derechos humanos y la impunidad no han sido hechos aislados
Regeneración, 5 de febrero de 2018.- El gobierno de Miguel Ángel Mancera ha encubierto violaciones a los derechos humanos cometidas por policías y servidores públicos de la Ciudad de México. Hay más de 500 denuncias por violaciones a los derechos humanos en su gobierno, pero Mancera niega que exista una crisis.
Apenas en diciembre de 2017, Mancera dijo tener la mejor policía del país, pero la realidad desmiente sus dichos.
Desde el primer día de su gobierno se han documentado graves casos de tortura, uso indebido de la fuerza y violaciones sistemáticas a la libertad de expresión. La Comisión de Derechos Humanos del DF ha emitido siete recomendaciones, pero ninguna han sido cumplidas por el Gobierno de la Ciudad. La omisión de estas medidas dejó como saldo la “justificación” de la más terrible represión vivida en esta Ciudad contra ciudadanos desde hace 20 años.
En cambio, su gobierno se ha distinguido por la represión contra ciudadanos que protestan.
Sin embargo, Mancera culpa al nuevo sistema penal acusatorio de ser el responsable del aumento de la inseguridad, con la intención de deslindarse de su responsabilidad.
De 2012 a la fecha, la policía capitalina han cometido más de 500 detenciones arbitrarias, pero la impunidad continúa y nadie es juzgado por tortura, extorsión o intimidación. En la «ciudad de vanguardia» que vive Mancera, la policía tiene carta blanca para abusar, robar y torturar y es protegida por su jefe. Los medios criminalizan a las víctimas y cuando las protestas crecen cambian su versión pero ni las disculpas ofrecen a las víctimas. Igual sucede con Mancera, para quien las víctimas son responsables de lo que les pasa «hasta que demuestren lo contrario». Con Mancera creció la corrupción, la inseguridad, las violaciones a los derechos humanos y después de todo ello ¿todavía alguien piensa que es de izquierda?