Ni el número de muertes ni el de explosiones bajan el ánimo de los residentes de Tultepec, la capital de la pirotecnia, quienes siguen avante con los festejos de su santo patrono entre cohetones fuegos artificiales.
Regeneración, 06 de marzo de 2017.- Ni los 47 muertos ni las decenas de heridos que han dejado las explosiones del 20 de diciembre y del 4 marzo pasado en el municipio de Tultepec borraron las ganas de los pobladores para que realizar la Feria Internacional de la Pirotecnia 2017, del 4 al 11 de marzo.
Y es que pese a todo, los habitantes de Tultepec, el mote de «La capital de la pirotecnia», tienen la pólvora en los más arraigado de su cultura.
«Tenemos muchos años siendo artesanos, productores, somos un pueblo vivo, unido entre generaciones, nos queremos y nos apoyamos para seguir adelante y así será siempre, Tultepec será siempre «La capital de la pirotecnia»», afirmó Ernesto Moreno, habitante.
Aunque el mercado por ahora no existe, la fabricación y almacenaje de pirotecnia se lleva a cabo en talleres al interior de las colonias, y en domicilios de manera clandestina.
Muchos productores se cuidan de hablar de su actividad dentro de sus hogares, y mientras su interlocutor no saque dinero cono muestra de que se trata de un cliente, ellos prefieren callar.
«No es que tengamos miedo, más bien que las autoridades pueden clausurarnos, aunque todos saben lo que hacemos», dijo una vendedora.
Así, para ellos, la mejor manera de honrar la memoria de sus fallecidos es fabricando y vendiendo más pirotecnia.
Incluso el director de Fomento Artesanal y Pirotecnia municipal, Juventino Luna, consideró que el mejor homenaje para las víctimas de explosiones sería con innovaciones en la edición 29 de la feria que ahora se realiza.
El evento, se lleva a cabo entre concurso de castillos, piromusicales, bombas pirotécnicas, juguetería pirotécnica, pamplonada pirotécnica, exhibición de globos de cantolla, tornafiesta, bailes tradicionales y populares, presentación de comediantes y ballet folklórico, entre otras actividades, se realizan anualmente en la feria dedicada al santo patrono del gremio pirotécnico, San Juan de Dios.
Se trata de una semana dedicada a actividades relacionadas con la quema de pirotecnia acompañada de música, bailes y actividades para todas edades.
«Son días de fiesta para todo el pueblo Son días de recibir turistas y a la vez de mandarle un mensaje al mundo de que la pirotecnia es como la vida es divertida pero también peligrosa y Depende cómo lo manejes puedes quemarte o seguir en ella», manifestó Sara Jiménez, productora.
Mientras la muerte les coquetea al oído y les acerca las chispas, los habitantes bailan alrededor del fuego, lo suficientemente lejos para no arden, al menos por esta vez.
Vía LSR