«No se puede transformar al México actual sin conocer la Historia», expresó AMLO en la presentación del tomo 3 del libro ‘Patria’, de Paco Ignacio Taibo II
Regeneración, 17 de octubre de 2017.- «No se puede transformar al México actual sin conocer la Historia, y no se puede transformar al México actual sin hacer Historia. La política es eso, hacer Historia», expresó el dirigente de Morena la tarde de este martes durante la presentación del tomo 3 del libro ‘Patria’, de Paco Ignacio Taibo II.
Acompañado del autor y el historiador Pedro Salmerón, López Obrador dio una introducción al público de la Feria Internacional del Libro en el Zócalo capitalino sobre el tercer tomo de ‘Patria’, que narra a detalle los eventos de la Historia Mexicana.
AMLO indicó que estos tres tomos son imprescindibles, «de obligada lectura», pues «no se puede transformar al México actual sin conocer la Historia».
A continuación el discurso que dio AMLO sobre el libro y, al final, el video completo del evento.
Los tomos de ‘Patria’ de Paco Ignacio Taibo II, la Guerra de Reforma, la Intervención Francesa y la caída del Imperio, los tres tomos son imprescindibles, de obligada lectura. El contenido es aleccionador y de verdad se disfruta.
Paco cuenta de manera magistral lo acontecido en este aciago periodo intercalando retratos de los protagonistas liberales y conservadores con sus ideas políticas y las batallas militares.
En esta investigación queda de manifiesto el predominio que en ese entonces tenía el clero sobre las consciencias y la vida pública del país.
Téngase en cuenta que, como lo describe el autor, la mayoría de los liberales que (y esa es la bella paradoja) y defendieron la República contra el Imperio, habían tenido casi todos ellos formación religiosa de influencia católica.
Guillermo Prieto había sido secretario de un sacerdote. Era guadalupano y creía en dios. Santos Degollado trabajo de escribiente en la Catedral de Morelia… a esta misma formación religiosa pertenecían.
Los liberales, puros o radicales, eran anticlericales pero no antirreligiosos. Francisco Zarco defendía esa postura dejando de manifiesto lo siguiente: ‘El partido que quiera destruir o desarraigar el Catolicismo sería demente o insensato porque intentaría lo imposible, lo peligroso, lo criminal. Nosotros, en las sublimes verdades del Cristianismo, encontramos condenado el despotismo y la opresión’.
Inculso Paco, el gran narrador de esta historia, sostiene que, desde su ateísmo, no puede menos que deshacer el falso mito de que la vanguardia liberal era atea.
Ahora bien, este proceso de transformación que inicia con el plan de Ayutla y termina con la caída del Imperio en 1867, es uno de los episodios de mayor confrontación política en nuestro país. Nunca se había librado tantas batallas en el terreno ideológico y militar como en esos 13 años de nuestra historia. La guerra era lo predominante.
Paco cuenta a detalle cada una de las acciones bélicas e incluye su conocimiento, y también deja ver su fascinación por el manejo de la estrategia militar.
No hay ningún escritor, menos que yo conozca, que sea tan minucioso en sus observaciones en esta materia.
Sobre ello Paco indica ‘No es fácil narrar una batalla en la que participan más de 20 mil hombres. Los clarines y los cañonazos tapan los gritos de los heridos. La ausencia de testimonios de los de abajo no puede ser suplida con nada’.
Y de manera por demás exigente Paco dice: ‘quede pues un esqueleto de esta historia’.
El libro Patria, sin embargo, esta es mi opinión, está muy bien concebido y extraordinariamente narrado; la prosa es impecable y su contenido está lleno de sabiduría. Y algo que es fundamental: está lleno de sentimientos.
Cuando trata lo de la aprehensión y fusilamiento de Melchor Ocampo, se enchina la piel: ‘El cura del pueblo, de apellido Morales, intentó confesar a Ocampo y recibió una amable respuesta. ‘No se moleste usted, yo estoy bien con Dios y él está bien conmigo’. Le pidieron que se arrodillara y respondió ‘¿Para qué? Estoy bien al nivel de las balas, que me peguen aquí’, dijo señalándose el pecho.
Así caía quien había pronunciado frases memorables como aquella de ‘ser liberal cuesta mucho trabajo, ya que se precisa ser hombre en todo’, o ‘me quiebro pero no me doblo’, una que aplica para estos tiempos.
También considero indispensable profundizar más sobre el liberalismo y el conservadurismo, corrientes ideológicas fundamentales en la historia de nuestro país y el mundo.
Destacan en la historia de las ideas políticas el comunismo el fascismo, el socialismo… pero subyacen como troncos básicos el liberalismo y el conservadurismo.
Tomemos en cuanta que, cuando triunfa la causa de la República, se llegó a pensar que el conservadurismo no volvería a renacer, sin embargo este pensamiento resurge poco después en el Porfiriato, y se mantiene con vigor y fuerza hasta nuestros días.
No se puede transformar al México actual sin conocer la Historia, y no se puede transformar al México actual sin hacer Historia. La política es eso, hacer Historia. Muchas gracias Paco por estas obras.