El organismo de las Naciones Unidas pidió a las autoridades mexicanas agotar todas las líneas de investigación que permitan esclarecer el asesinato del periodista.
Regeneración 30 de junio de 2017.- El pasado 26 de junio, los restos del periodista Salvador Adame fueron localizados en el fondo de una barranca de Tierra Caliente, Michoacán. Luego de que fuera secuestrado por un grupo armado el 18 de mayo pasado en el municipio de Múgica.
Debido a la falta de pruebas y avances en cuanto a la investigación de los hechos en contra del periodista, el organismo emitió un comunicado en el cual enfatizó, “La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) llama a las autoridades a esclarecer completamente la desaparición del periodista Salvador Adame y a agotar todas las líneas de investigación, incluidas las relacionadas con su actividad periodística”.
Tocando el tema de desapariciones se enfatizó la coadyuvancia entre la familia y las autoridades para que ambos tengan un constante flujo de comunicación.
“La ONU-DH recuerda que en casos de desaparición de personas es fundamental contar con la participación de la familia de la víctima durante todo el proceso. Las autoridades pertinentes tienen la obligación y la familia de la víctima el derecho a ser informada directamente sobre la investigación y no a través de terceros, incluyendo medios de comunicación, a contar con acompañamiento psicosocial de calidad, a que se garantice su protección efectiva y el resto de derechos previstos en la legislación mexicana y en el marco internacional de derechos humanos”, indica el documento.
Por otro lado, el organismo dejó en claro que en los casos donde la víctima se encuentre muerta, se deberá garantizar que el proceso de identificación se deberá llevar conforme a los más altos estándares científicos para que una vez que se haya confirmado la identidad, se le comunique de forma asertiva a la familia.
“Cuando existan dudas sobre la identificación de los restos, se deben llevar a cabo peritajes independientes”, abunda.
Cabe señalar que México se encuentra ubicado en el tercer lugar entre los países más peligrosos para ejercer la profesión de periodista a nivel mundial, ya que de 2002 se encontraba en el lugar 75; de acuerdo a cifras del informe anual de Reporteros Sin Fronteras.
La gravedad de esta situación ha ocasionado que organizaciones civiles, diversos medios de comunicación, fundaciones y defensores de Derechos Humanos han solicitado a instancias internacionales la protección no sólo a su integridad sino el respeto a su profesión.
Con información de: El Universal