Petrobras en huelga contra privatización

* Principal central de trabajadores petroleros de Brasil sostiene huelga nacional «histórica» que ya lleva 6 días y se prolongará por tiempo indefinido

* Defienden trabajadores brasileños su soberanía energética; Gobierno subasta yacimiento «Libra» a empresas extranjeras

* Dirigencia sindical reportó que al día de hoy, 43 de 46 plataformas están paralizadas;  Entre 90% y 100% de las unidades operacionales de Petrobras

fup-moraesRegeneración, 22 de Octubre de 2013. En Brasil, la huelga de los trabajadores petroleros llegó a su sexto día. La Federación Única de los Petroleros (FUP) que agrupa a la mayoría de los trabajadores de Petrobras, hizo un llamado a fortalecer la huelga frente a la persistencia oficial de privatizar «Libra», importante yacimiento de reciente descubrimiento.

El gremio petrolero lamentó que el Gobierno hubiera proseguido con la licitación del yacimiento calculado en hasta 12 mil millones de barriles de petróleo,  pese a las protestas de diferentes organizaciones sociales. 

Los sindicalistas informan que 43 de 46 plataformas han sido paralizadas; Una adhesión de entre el 90% y el 100% en las unidades operacionales de Petrobras.

Aseguran que cualquier persona en el interior de las instalaciones tiene permitido salir, ya que sólo bloquean la entrada. Aunque indicaron que la producción de petróleo está siendo mantenida parcialmente por equipos de contingencia de Petrobras integrados por gerentes, supervisores y otros profesionales.

Reportan además la presencia de cuerpos de seguridad de Petrobras, empleados «poco concientes», en una intención de provocar violencia contra su manifestación pacífica.

Garbanzo de a «Libra»

libra-brasilUn consorcio de empresas participó en conjunto como una única oferta, en la subasta de «Libra», realizada en Río de Janeiro. Incluye además de Petrobras, a la francesa Total (con un 20% de participación), la anglo-holandesa Shell (20%); la China National Corporation (10%) y China National Offshore Oil Corporation (10%).

«Las empresas privadas aliadas también serán beneficiadas, ya que, al producir esa riqueza van a obtener beneficios significativos, compatibles con el riesgo asumido con las inversiones que están realizando en el país», justificó Dilma Roussef.

En un comunicado el Coordinador General de la FUP João Antônio de Moraes, declaró: «Antes de la subasta, Brasil era dueño del 100% del mayor campo de petróleo descubierto en el país. Ahora, el pueblo brasileño quedó un 60% más pobre».

«La entrega del 60% del campo de Libra a las multinacionales es uno de los mayores crímenes de lesa patria que sufrimos en el país. Se trata de un día triste para el pueblo brasileño», agregó De Moraes.

Venta anunciada

cartel-lulaEl 20 de Septiembre, cerca de 90 organizaciones solicitaron a la presidenta Dilma Roussef audiencia «para tratar directamente las razones que nos llevan a este posicionamiento, con la certeza de que se trata de una solución de acuerdo a los intereses de la soberanía nacional y del pueblo brasileño».

A través de una carta firmada por centrales de trabajadores petroleros, petroquímicos, electricistas. Organizaciones campesinas, populares, ONGs, organizaciones de mujeres, estudiantes, agricultores, pescadores y muchas más, expresaron a la presidenta de Brasil:

«Estamos dispuestos a contribuir con nuestras reflexiones, experiencias, creatividad y capacidad. Queremos ser escuchados, para evitar que el poder económico se escucha en primer lugar», expresaron en aquella ocasión.

A principios de mes de Octubre, en otra carta al presidente del Partido de los Trabajadores, el dirigente petrolero aprovechó este asunto de «Libra», para recordar los orígenes de ese Partido, ligado a las luchas de los movimientos sociales.

Expresó que la iniciativa de la presidenta Dilma Roussef «hiere la soberanía nacional, no aumentará el desarrollo nacional y la explotación de estas reservas sobre la lógica del lucro y abastecimiento de otras naciones, colocará en riesgo el medio ambiente».

Pero a pesar de la notoria oposición, la subasta se llevó a cabo, en medio de fuertes protestas como la del jueves pasado, cerca de mil personas cercaron la sede del Ministerio de Energía de Brasil para exigir que se suspenda la licitación.

Con información de: radionf.org.brlibreprensa.com, pagina13.org.br. 20minutos.comamericaeconomia.com