La mayoría de campos agrícolas son utilizados para el autoconsumo “a medias” y lo que resta se comercializa, pero la venta de insumos se ha vuelto difícil por la introducción de cadenas comerciales que venden mercancías de mala calidad y de vendedores de los mismos productos cosechados en otros estados
Regeneración, 3 de julio de 2016.– La zona centro de Veracruz está siendo amenazada por las cadenas comerciales y los introductores agrícolas, se prevé que a finales de 2016, la pobreza aumente de manera desmedida entre las familias campesinas. Es necesario un apoyo que de nueva luz a la producción del campo en la región que no consume sus propios productos.
A decir de Raúl Vásquez Santos, dirigente de la Vieja Guardia Agrarista, «en el balance del medio año, las condiciones económicas de los campesinos es muy difícil y lo peor de todo es que no hay síntomas de que se vayan a registrar mejores oportunidades que nos puedan ayudar a salir de la crisis en la que nos encontramos».
Aseguró que tanto los problemas nacionales como mundiales «impactan, entre otros sectores, en la producción agrícola y en especial en aquellos que no tienen ni la tecnificación ni el financiamiento para impulsar la producción agraria. Nada más hay que ver cómo se encuentran los campos de producción de esta zona, abandonados y con una mísera capacidad para producir».
Mencionó que la mayoría de campos son ocupados para el autoconsumo y sirven para “medio comer y en algunos casos, en los menos, lo que sobra se intenta vender en el mercado regional».
Expuso que en Nogales y Maltrata «tienen una amplia producción en legumbres, pero la mayoría se utilizan para el autoconsumo, la menor parte de la producción se va a los mercados, pero el acaparamiento que hacen introductores que vienen en especial del estado de Puebla, provoca que las ventas sean muy bajas».
Ese, lo calificó como un problema difícil pues los introductores desplazan y afectan a los productores de la zona centro, traen productos de otras entidades como Puebla, Sinaloa, Tabasco y Oaxaca, «y eso provoca que las productores locales tengan problemas muy graves».
Dijo que “una de las consecuencias que se tendrán, sin duda, es que habrá mayor número de pobres entre las familias de los campesinos. Los ingresos económicos son sólo para vivir al día y no se puede tener un dinero que permita ahorrar ante una emergencia de salud, por ejemplo».
El 2016, indicó, «es uno de los años con mayores problemas de rentabilidad para el campo veracruzano, por todos lados vemos como hay quejas de la falta de apoyo para la producción y ahora, en este segundo semestre no dudamos que sigamos en las mismas condiciones: sin apoyo para la producción y enfrentar los desplazamientos que hacen los introductores de otros estados del país, además de las mismas cadenas comerciales que incluso traen productos agrícolas que se siembran y cosechan en México, se empaquetan en los Estados Unidos y se regresan con precios muy caros».
Con información de La Jornada Veracruz