Mientras Meade hace declaraciones sobre su combate a la corrupción, el partido que lo postula, también representa a los ex gobernadores más corruptos.
Por Jenaro Villamil| Homozzaping
Regeneración, 24 de enero de 2018.- El precandidato único del PRI, Verde y Panal a la presidencia de la República, José Antonio Meade, propuso esta mañana de miércoles tres iniciativas para combatir la corrupción y la impunidad que consistirán en crear un fondo de becas producto del dinero y bienes provenientes de quienes sean enjuiciados, agilizar el proceso para que fiscales puedan girar órdenes de extinción de dominio y volver obligatoria la certificación patrimonial de los servidores públicos.
Acompañado por las dirigencias de los tres partidos que lo postulan y de los coordinadores parlamentarios del PRI, César Camacho y Emilio Gamboa Patrón, Meade no mencionó ninguno de los procesos que actualmente se ventilan contra, al menos, 9 ex gobernadores priistas acusados de corrupción.
Meade simplemente mencionó que se incrementarán las penas por los delitos de corrupción y que no esperará a que transcurran los comicios para empezar a trabajar en torno al tema.
“No voy a esperar para que termine la elección. En vez de prometer hay que ponernos a trabajar. Voy a fondo contra la corrupción y la impunidad”, aseveró.
Explicó que propone facultar a los fiscales especializados para ejercer la extinción de dominio de manera “ágil, equilibrada y justa”; ya que así también se recuperarán los bienes obtenidos por la delincuencia organizada para apoyar a los estudiantes.
El mensaje de Meade se produjo el mismo día que al ex gobernador priista de Nayarit, Roberto Sandoval, le abrieron 400 averiguaciones previas y carpetas de investigación en torno a distintos delitos relacionados con malversación y uso indiscriminado de recursos públicos, según la Fiscalía General del estado.
También se produce mientras transcurren los procesos judiciales en contra de Javier Duarte, ex gobernador de Veracruz, de Roberto Borge, ex mandatario de Quintana Roo, y que César Duarte, ex jefe del Ejecutivo de Chihuahua, se encuentra prófugo.
Otros ex gobernadores priistas que están siendo procesados por corrupción son Tomás Yarrington y Eugenio Hernández, ambos de Tamaulipas, vinculados en un tribunal de Texas con el crimen organizado.
También están los casos de Rodrigo Medina, ex gobernador de Nuevo León, de Andrés Granier, ex mandatario de Tabasco, y de decenas de funcionarios estatales vinculados a las redes de corrupción.
Meade no mencionó ninguno de los casos más delicados de presunto peculado electoral como el de la empresa brasileña Odebrecht que habría pagado 10 millones de dólares en sobornos.