Los funcionarios pueden jurar todas las mentiras optimistas que quieran en cuanto a 2018. La realidad será cruel con ellos y con los pocos que les crean y hasta voten por ellos.
Por Antonio Gershenson
Vamos a informar sobre datos del año pasado mundial en su conjunto, hasta donde es posible a principios de año.
En varios casos no se ha hecho público, en alguno se acaba de dar una noticia parcial. Por ejemplo, En el caso del movimiento económico anual, el de China se deducía por estudios en 6.8 por ciento, y el dato oficial se hizo público hace apenas unos días, en 6.9 por ciento.
Este dato resulta importante porque es el primero en que refleja un aumento, pues el dato del año anterior fue de 6.7. Y el producto interno bruto (PIB) anual venía bajando desde el valor de 2010, con 10.6 por ciento. Su crecimiento promedio entres 2007 y 2017 fue de 8.8 por ciento.
Los datos de este país e India son los más importantes, en éste el crecimiento del PIB fue un poco menor, de 6.7 por ciento para 2017, frente al del año anterior, cuando alcanzó 7.1 po ciento. Ambas naciones son las de mayor población en el mundo, cada una con más de 250 millones de habitantes. Éstos y los siguientes son datos publicados por el Banco Mundial, conocido como World Bank en inglés, aunque a los países en que se habla ese idioma no les vaya muy bien en sus estudios.
Los siguientes países son los que siguen en esa escala, éstos y todos ellos son de Asia (promedio desde 2007):(ver imagen)
Estos seis y los dos anteriores son los países con mayor crecimiento económico del mundo. Lógicamente, en el estudio del Banco Mundial por regiones, las dos con mayor crecimiento en el planeta, las dos primeras son Sur de Asia, con India y Pakistán, conforme a su valor desde el año 2015 hasta 2020, con la previsión de los últimos cuatro, con promedio de de 7.1 por ciento. Y el otro es el Este de Asia y el Pacífico que incluyen a China.
Los anteriores (Sur) están, en su gran mayoría y varios con gran población: Indonesia con 260 millones de habitantes, Pakistán con más de 180 millones y Vietnam con casi 100 millones. En total, los ocho países suman más de 3 mil millones de habitantes.
Por otro lado, Estados Unidos, en los mismos 11 años, tuvo en crecimiento promedio de su producto de 1.4 por ciento. Y en Europa Occidental, durante el mismo periodo, se situó en 1.5 por ciento en Alemania, a -0.5 en Italia.
Es absurdo amarrarse al comercio exterior con el norte. México tuvo un crecimiento de 42 años después del presidente Lázaro Cárdenas, con un promedio de 6.3 por ciento anual entre 1940 y 1982. En los siete sexenios hubo un buen crecimiento.
A partir de 1982, el crecimiento del PIB declinó drásticamente, decayó hasta la fecha a un promedio de 1.3 por ciento. Aunque en el año que acaba de terminar la economía creció 2.1 por ciento, no hace ninguna gracia, porque la industria declinó 0.7 por ciento.
Si vemos en una gráfica de los últimos cuatro sexenios, año por año, veremos entre unos y otros, en el año o años de cambio de gobierno, hay una fuerte baja en el crecimiento. En dos casos hubo una gran caída, en 1995 a -6.3 por ciento, y en 2009 a -5.3. En los otros hubo una fuerte baja, en 2001 con -0.2, y en 2013 con 1.6 por ciento. Entre ellos, se alternaron con crecimientos en años intermedios del sexenio, hasta 7.1 por ciento en 1997, en 4.5 en 2006, en 5.1 en 2010 y con 3.3 por ciento en 2015. Y nuevamente hacia abajo en 2.1 hasta el momento, en 2017.
Los funcionarios pueden jurar todas las mentiras optimistas que quieran en cuanto a 2018. La realidad será cruel con ellos y con los pocos que les crean y hasta voten por ellos.
Más adelante, habrá que desarrollar más, aquí, la relación entre los periodos de crecimiento más rápido y el de mucho más lento, con las décadas con una fuerte y creciente industria estratégica pública, y la época de desnacionalización que vivimos.
De ahí que haya incluso grupos de empresarios que comprendan eso, me consta. Tal vez el 18 de marzo, 80 aniversario de la Expropiación Petrolera. No es casual que los funcionarios de Petróleos Mexicanos tengan prisa por vender o alquilar por 30 años o más, este año lo más posible de lo que queda de Pemex y demás.