Ante la posible destitución por parte del Congreso Pedro Pablo Kuczynski decidió renunciar debido a los sobornos que la empresa brasileña le dio por supuestos contratos.
Regeneración, 21 de marzo de 2018.- El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, renunció un día antes de que el Congreso votara una moción de destitución por sus lazos con la brasileña Odebrecht, tras la supuesta compra de votos para salvarlo en diciembre.
Ante la amenaza de destitución y ahora la renuncia, la incertidumbre está a flor de piel en el país que será anfitrión en abril de la Cumbre de las Américas, a la que asistirá el mandatario estadounidense Donald Trump y una treintena de gobernantes más, incluido el venezolano Nicolás Maduro, pese a haber sido eliminado de la lista de invitados.
Los principales actores de la actual política peruana es el parlamentario Kenji Fujimori, hermano y feroz opositor de Keiko Fujimori, la líder de Fuerza Popular, el mayor partido de oposición en el Congreso, en cuyas manos está la supervivencia política también de Kuczynski.
Congresistas fujimoristas difundieron el martes un vídeo en el que aparece Kenji intentando convencer a otros parlamentarios de que apoyen a Kuczynski a cambio de obras públicas en sus distritos.
El apoyo de Kenji y otros nueve diputados afines lograron salvar a Kuczynski de la primera moción de destitución, a cambio del indulto a su padre Alberto Fujimori (1990-2000), que cumplía 25 años de cárcel por corrupción y crímenes de lesa humanidad. Ello les valió a este grupo de diputados la expulsión del partido.
Pero las mentiras del presidente sobre sus presuntos vínculos con Odebrecht cuando era ministro de Economía en el gobierno de Alejandro Toledo -sobre el que pesa también una orden de extradición por haber recibido 20 millones de dólares de la constructora brasileña- parecen estar a punto de cavar su tumba política.
Odebrecht reveló que había pagado casi cinco millones de dólares por asesorías a empresas ligadas al presidente cuando era ministro, lo que había negado.
La constructora admitió además que hizo aportes de campaña en 2006 y 2011 a los últimos cuatro ocupantes del sillón presidencial peruano, incluido Kuczynski, y a Keiko Fujimori.
Kuczynski se convirtió así en el primer mandatario en ejercicio en perder su puesto por los tentáculos corruptores de Odebrecht, que admitió haber pagado decenas de millones de dólares en sobornos en varios países latinoamericanos para adjudicarse contratos de obras públicas.
Ahora lo reemplazaría el primer vicepresidente y actual embajador en Canadá, Martín Vizcarra, para que complete el actual periodo de gobierno, que culmina en julio de 2021.