La Policía antidisturbios colombiana arremetió contra la población afrocolombiana que mantenía un paro cívico pacífico para pedir servicios básicos en su comunidad.
Regeneración, 22 de mayo de 2017.- Durante el fin de semana, la población de Buenaventura en Colombia fue violentamente reprimida por mantener un paro pacífico en demanda del servicio de agua y otros servicios básicos en la comunidad.
Desde el lunes pasado, la principal zona portuaria de Colombia, que deja una derrama económica de alrededor de 5.8 billones de dólares, realizó un Paro Cívico Pacífico y es que si bien es una de las zonas que más dinero produce para Colombia, la población del lugar, mayoritariamente afrodescendiente, vive en pobreza sin hospitales, con la tasa más alta de muertes de infantes, 60 por ciento de desempleo y 17 de analfabetismo.
Pero aunque sus demandas son legítimas y las han respaldado diversos sectores en Colombia, el gobierno de Juan Manuel Santos decidió reprimirlos el pasado viernes con gases lacrimógenos con el único objetivo de desmantelar los puntos de concentración para desbloquear las vías del negocio portuario, consideraron los organizadores del Paro.
El mismo viernes, el Comité del Paro Cívico estuvo en conversaciones con una delegación del gobierno colombiano, que en lugar de garantizar la inversión para resolver los problemas de agua, llevaron a grupos de choque que vandalizaron la ciudad.
Se presentaron saqueos a tiendas y se declaró toque de queda para los pobladores, sin embargo, mientras sucedían los robos, la policía, que horas antes había estado reprimiendo personas, brilló por su ausencia, relató el diario Colombia Plural.
“La gran paradoja es que atacaron a mujeres, niños, niñas, jóvenes y hombres en estado de indefensión y al momento de los saqueos, que fueron por más de 3 horas, brillaran por su ausencia )los agentes de policía) y fueran los mismos ciudadanos quienes defendieron, a través de una cadena humana, uno de los supermercados”.
Hacia las 23:00 horas del viernes, la radio local anunció la llegada de la Infantería de Marina y el Ejército para “retomar el control de la ciudad”.
Pese a la represión violenta, la población local salió a las calles el sábado 20 con banderas colombianas y vestidos de blanco bajo consignas como “sólo el pueblo salva al pueblo”.
De acuerdo con la población, hay un pliego petitorio de ocho puntos críticos que requieren atención en la demarcación: salud, educación, agua potable, territorialidad, empleo, protección al medio ambiente, atención a las víctimas y espacios de recreación. Una multiplicidad de factores estructurales que, según quienes integran el comité del paro cívico, deberá ser asumido en su totalidad por el gobierno federal.
Algunos de los representantes de la comunidad afro en Colombia, como el vocero de la comunidad en Bogotá, Juan de Dios Mosquera, dijo que están en resistencia y que apoyan el Paro Cívico Pacífico organizado por la población de Buenaventura, quienes atribuyen al abandono de la poblaciones afro a una política de Estado que invisibiliza a las comunidades negras no sólo de Colombia sino en toda América.
Por su lado, la comunidad afromexicana también se pronunció al respecto, en voz de Majine Jiménez, presidenta de la asociación civil Mano Amiga de la Costa Chica, de Cuajinicuilapa, lugar de la costa de Guerrero conocida como “La Perla Negra del Pacífico” por su alta concentración de población afro.
“Como mujer afromexicana, originaria de Cuajinicuilapa, Guerrero México, considero que el Paro cívico del Pacífico, es un grito desesperado ante la discriminación estructural que sufren nuestros hermanos afrocolombianos, es un grito de resistencia que desde años atrás había sido generado, más de doscientos mil personas, en un 90 por ciento descendientes de africanos esclavizados organizados, hicieron vibrar las calles del puerto de Buenaventura, dejando como muestra que el pueblo negro organizado y unido, puede accionar y exigir lo que le corresponde”, señaló.
Vía Colombia plural y El País
#HOY | Así se vieron las calles de Buenaventura, puerto principal de Colombia, que continúa en pie de lucha contra el desempleo y la pobreza pic.twitter.com/EagkFpjjxH
— teleSUR TV (@teleSURtv) 22 de mayo de 2017
Mi tío reportando desde Buenaventura. #TodosConBuenaventura ¡El pueblo no rinde, carajo! ¡Al pueblo se le cumple, carajo! pic.twitter.com/CV3BFcjU9t — Karola Enriquez (@KarolaEnriquez) 22 de mayo de 2017
Esto sucedió hoy en #Buenaventura. No se puede tratar el asunto sólo bajo la perspectiva del «orden público». pic.twitter.com/iGi3Hljuuj
— Yamit Palacio (@YamitPalaVilla) 22 de mayo de 2017
En el #DiadelaAfrocolombianidad No más robo e injusticias para los pueblos afro. Somos Buenaventura y somos Chocó! @EEColombia2020 pic.twitter.com/nEYcDUN0U4 — Jose Antequera (@Antequerajose) 21 de mayo de 2017
Todos somos Buenaventura. Sigue el Paro Cívico. Sigue el silencio de Santos. pic.twitter.com/GmNHMurqro
— Amaury Núñez (@AmauryNG) 21 de mayo de 2017