Rosario Robles desvió 400 mdp del NAIM para compra de terrenos: Zebadúa

Emilio Zebadúa González señaló que el proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México estuvo relacionado en el mal manejo de recursos públicos

Regeneración 24 noviembre de 2020. Emilio Zebadúa González hizo una declaración que retrata la manera en la que se manejó el dinero de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).

En el documento se indica que el proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) también estuvo relacionado en el mal manejo de recursos públicos.

Tuve conocimiento de los siguientes hechos, que podrían constituir algún ilícito, vinculado con el indebido pago de terrenos aledaños al denominado NAICM”, se lee en la declaración a la que tuvo acceso Sin Embargo.

Los manejos en la Segob y Sedatu

Zebadúa indicó que el Grupo Aeroportuario Internacional de la Ciudad de México (GACM), a cargo de Federico Patiño, la Secretaría de Gobernación y la Sedatu conformaron un grupo para adquirir o pagar terrenos que servirían al aeropuerto.

Las tres áreas se habrían negociado con «supuestos» ejidatarios y propietarios de las zonas de Atenco, «Tlateles» o el «Moño» que colindan con la obra cancelada.

En el texto se detalla que se expidieron 200 cheques personalizados con las cantidades de 300 mil, 400 mil y hasta 10 millones de pesos hasta llegar a los 400 millones.

Dicha cantidad que fue destinada supuestamente al programa «Política de Desarrollo Urbano y Ordenamiento del Territorio».

¿Dónde quedó el dinero?

No había posesionarios ni propietarios, pero aún así se entregó el dinero a los peticionarios del “Frente Auténtico del Campo”.

De inmediato Rosario solicitó a Enrique González Tiburcio, titular de la subsecretaría de Ordenamiento Territorial realizar los trámites para contar con el dinero.

Como no se logró acreditar que estas personas eran las propietarias, Gonzáles Tiburcio introdujo el término ayuda social” para justificar la entrega de recursos.

Zebadúa dijo que la dependencia no tenía la facultad pues no se contaba con un presupuesto para ello.

Cuando se determinó la realización del programa fachada, Rosario Robles señaló que procedería «independientemente».

«Todas estas actuaciones y decisiones se tomaban a nivel del gabinete presidencial y con la gente de confianza del entonces presidente Enrique Peña Nieto».

«Nunca participé, ya que la secretaria Rosario Robles Berlanga instruía a sus subordinados para que actuaran de esa forma«, puntualizó Zebadúa.