La empresa tiene ciertas características que hace que se presuma que incurre en la simulación de transacciones que se consideran como ilegales.
Regeneración, 27 de febrero de 2018.- Ayer lunes, se reveló que la empresa Manhattan Master Plan Development, que compró la nave industrial de Ricardo Anaya Cortés, se encuentra entre la lista de empresas fantasma detectadas por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), misma que fue publicada el día de hoy por el Diario Oficial de la Federación (DOF).
El documento indica que “las autoridades fiscales […] detectaron que los contribuyentes señalados emitieron comprobantes sin contar con los activos, personal, infraestructura o capacidad material para prestar los servicios […] que amparan tales comprobantes”.
Detalla que varias de las acciones en los comprobantes fiscales califica como contratos simulados, lo que implica que se incurrió en delitos previstos en el Código Fiscal de la Federación, reglamentación que especifica que en caso de que un contribuyente emita “comprobantes sin contar con los activos, personal, infraestructura o capacidad material, directa o indirectamente, para prestar los servicios o producir, comercializar o entregar los bienes que amparan tales comprobantes, o bien, que dichos contribuyentes se encuentren no localizados, se presumirá la inexistencia de las operaciones amparadas en tales comprobantes”.
Manhattan Master Plan Development aparece en la lista de 49 empresas a las que se les detectaron este tipo de operaciones, lo cual pone al candidato presidencial de la coalición “Por México al Frente” en el centro de la polémica luego de que en días recientes de le relacionara con una investigación sobre lavado de dinero, así lo detalla La Jornada.
Según el SAT, la empresa que compró la nave industrial de Anaya es una “facturera”, es decir, expide facturas por servicios inexistentes que permiten a terceros aplicar deducciones sobre el pago de sus impuestos.
Manhattan Master Plan Development cuenta con un capital social de 10 mil pesos aportados por Luis Alberto López López y por María Ramírez Vega, supuestos empleados del empresario Manuel Barreiro, quien fue señalado recientemente por dos empresarios como el gestor de una estrategia de lavado de dinero para favorecer a Anaya.
La simulación de la venta de una nave industrial de la empresa Juniserra S.A. de C.V. a la presunta empresa fantasma Manhattan Masterplant Development fue dada a conocer entre 2016 y 2017 por abogado Adrián Xamán McGregor.
La empresa de Anaya adquirió el inmueble en 10 millones de pesos y lo vendió en 54 millones de pesos, para ocultar el origen del dinero y al beneficiario final (Ricardo Anaya), Barreiro encargó a sus clientes construir un esquema en donde se utilizaran empresas fachada en diferentes países.
Esto se suma a las acusaciones hechas recientemente en contra Anaya, quien se defendió y acudió ante la PGR para exigir al encargado de despacho, Alberto Elías Beltrán, que aclare de manera inmediata si realiza una investigación en su contra. De lo contrario, dijo, se estaría confirmando que la dependencia encargada de procurar justicia está operando a favor del partido gobernante, el Revolucionario Institucional (PRI), y su candidato, José Antonio Meade Kuribreña.
La dependencia invitó a Anaya a comparecer ante la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido), no obstante, él se negó.
Tras las acusaciones, varios panistas como Diego Fernández de Ceballos, han respaldado a Ricardo Anaya asegurando que la PGR está difundiendo información de manera engañosa para perjudicar la imagen su imagen de cara a las elecciones presidenciales, pues las encuestas lo colocan en segundo lugar de la preferencia electoral.