Asumirá el interinato Michel Temer en medio de desaprobación entre los brasileños. Aquí te decimos quien es ese personaje.
Regeneración, 12 de mayo 2016.- Dilma Rousseff, presidenta de Brasil fue suspendida de su cargo por decisión del Senado de ese país.
Con el aval de 55 senadores y la votación en contra de otros 22, Rousseff permanecerá alejada de la presidencia por hasta 180 días, mientras se desarrolla el juicio político.
Asumirá el mandato interino, el vicepresidente Michel Temer, parte del partido centrista Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) que en colación llevó a Dilma a la presidencia en 2010 y 2014.
Si durante el proceso, Rousseff es encontrada culpable por dos tercios de la Cámara Alta, dejará definitivamente la presidencia y Temer completará el mandato.
Dilma está acusada de alterar las cuentas públicas para maquillar el déficit presupuestario, acusación que niega al igual que la comisión de cualquier otro delito atribuido por la oposición.
El proceso continúa con una notificación formal a la funcionaria por parte del Senado, y será justamente esta Cámara, la que decidirá qué derechos conserva Rousseff durante su suspensión, así como si mantiene a sus colaboradores o el uso de residencias y transportes oficiales.
El Senado comenzará con la fase de instrucción, presentación de pruebas y testimonios, al tiempo que Rousseff presenta su defensa.
Tras esto, la comisión especial del Senado elaborará un nuevo informo en el cual se detallará si la acusación precede o no; el presidente del Supremo Tribunal Federal Ricardo Lewandowski, encabezará la sesión en el Senado en la cual por mayoría simple se decidirá la continuidad del proceso o si se archiva.
En caso de continuar, se abrirá la etapa de juzgamiento.
¿Quién es el nuevo presidente interino?
Michel Temer, declarado devoto religioso, cercano a los sectores evangélicos, asumirá a partir del día de hoy la presidencia del quinto más poblado del mundo.
Casado en terceras nupcias con una exmodelo de 32 años, Temer, cree firmemente que Dilma no regresará al poder y será él quien termine el mandato, por lo cual, la última semana trabajó en lo que será su proyecto de gobierno, no obstante, sufrió un grave revés la semana pasada, cuando uno de sus principales aliados Eduardo Cunha, fue separado de su cargo.
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Cunha, quien es conocido como uno de los mayores símbolos de corrupción en Brasil, habría sido el encargado de conseguir el respaldo necesario para comenzar con la implementación de una dura política neoliberal que pretende imponer Temer.
Resalta que el 58% de la población opina que Temer debería ser sometido a juicio político y en una elección presidencial sólo el 2% votaría por él, es decir, comienza su interinato con altos índices de desaprobación.
Le espera un gobierno difícil, enfrentado al PT y otros partidos de izquierda, con investigaciones que corren en el Supremo Tribunal Federal contra algunos de sus actos y de varios de sus aliados.
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Por otra parte, mientras en el Senado se consumaba el golpe institucional contra Rousseff, miles de personas se juntaban en las ciudades brasileñas para protestar contra esta acción.
En Brasilia, una manifestación de mujeres que respaldaban a Dilma fue reprimida brutalmente, ante lo cual, muchos se preguntan si esta muestra de represión será lo que espera a los brasileños con el suertudo o conspirador, Temer.
Con información de BBC, La Jornada y TeleSur.