Las nuevas sanciones no limitan del todo las transacciones petroleras entre los dos países, pero sí prohíben la realización de nuevas transacciones por parte de entidades estadounidenses privadas y del gobierno federal.
Regeneración, 25 de agosto de 2017.- Este viernes, Donald Trump, presidente de Estados Unidos signó una nueva orden ejecutiva que impone más sanciones financieras al gobierno de Venezuela, encabezado por Nicolás Maduro.
La Casa Blanca informó en un comunicado que las nuevas penalidades son porque el presidente venezolano ha restringido el acceso a su ciudadanía por intereses políticos, a los alimentos y medicinas y por las violentas supresiones a la gente que libremente expresa su opinión en contra del gobierno.
La portavoz de Trump, Sarah Huckabee Sanders firmó el mensaje que explica que “La decisión del régimen (de Maduro) de crear una Asamblea Constitucional ilegitima y de contar con una entidad que usurpa los poderes de la Asamblea Nacional democráticamente electa; representa un rompimiento del legítimo orden constitucional de Venezuela”.
Las nuevas sanciones no limitan del todo las transacciones petroleras entre los dos países, pero sí prohíben la realización de nuevas transacciones por parte de entidades estadunidenses privadas y del gobierno federal, sobre los nuevos bonos de deuda emitidos por el gobierno de Maduro y la paraestatal petrolera bolivariana PDVSA.
Además, también anula el manejo de algunos bonos preexistentes del sector público venezolano y de pagos por dividendos al gobierno de Maduro.
Estas sanciones tienen una cláusula de excepción por un plazo de 30 días, que permite el financiamiento del intercambio comercial de Petróleo (exportaciones e importaciones) que involucren únicamente a la empresa energética Citgo (distribuidora de gasolina en Estados Unidos) y de asuntos preexistentes selectos de deuda venezolana; y para el financiamiento de mercancías por razones humanitarias.
De acuerdo con la Casa Blanca, estas medidas fueron establecidas para “mitigar” el daño a la sociedad venezolana por parte de la estadounidense pero también, dejan ver un doble estándar en las políticas de Trump y que se avocan a mantener intactos los intereses energéticos de Estados Unidos en Venezuela.
“Las medidas están cuidadosamente calibradas para negarle a la dictadura de Maduro recursos críticos que financien y mantengan su mandato ilegítimo, para proteger al sistema financiero de Estados Unidos de cualquier complicidad con la corrupción en Venezuela, el empobrecimiento del pueblo venezolano y que permita la asistencia humanitaria”, dijo la Casa Blanca.
“Estados Unidos reitera su llamado a que en Venezuela se restaure la democracia, se lleven a cabo elecciones libres y justas, se libere inmediatamente de manera incondicional a todos los prisioneros políticos y se ponga fin a la represión del pueblo venezolano”, concluye el comunicado de la Casa Blanca.
Con información de Proceso