Esta cargado de racismo y clasismo, los mensajes que contienen pueden ser muy crudos; para algunos sólo es una broma, para otros un tema delicado.
Regeneración, 24 de abril de 2017.- Los «memes» ya forman parte de nuestra vida diaria digital, algunos de ellos se hacen tendencia y se crean tal popularidad que se hacen un tema de conocimiento general. Muchos de ellos suelen ser agresivos, pero suavizados con el humor mexicano que nos caracteriza. también entre los memes, se marcan tendencias, tal es el caso del nuevo que empieza a tomar fuerza circulando por redes sociales.
Una paleta de colores, que va de un rosa claro a un café oscuro, pasando por varias tonalidades. Del lado izquierdo, donde empiezan los tonos rosas y claros, se escriben frases con alto sentido de personas de mayor nivel adquisitivo, podría decirse de manera «correcta y admirable». Por su contrario, su lado derecho, las frases suelen ser todo lo opuesto.
Ante la llegada de este meme, organizaciones en busca de erradicar el racismo, apuntan que estos mensajes rozan entre el racismo y el clasismo, fomentando jerarquización y valores a ciertos grupos de personas por su tono de piel.
Skin-O-Meter el nombre que se le ha dado a este particular meme. Existen varias paginas de Facebook que recopilan estos memes, siendo de las más populares Skin- O- Meter Memes, con más de 400 mil seguidores.
De acuerdo con este meme, las personas de tez clara compran cosas de contado, ven los Premios Oscar y se ven bien con el cabello teñido de colores. Los de tez morena compran a meses sin intereses, ven los Premios Lo Nuestro y nunca deben teñirse el cabello. “Estos memes evidencian el cruce complejo entre el clasismo y el racismo”, apunta Judith Bautista, una de las coordinadoras del Colectivo para eliminar el racismo en México (Copera), “Está fomentando una jerarquización y valorización de las personas no solo basada en sus gustos, sino en su acceso a bienes de consumo y oportunidades”.
El meme se conoce como Skin-O-Meter (medidor de tonos de piel) en Facebook y una decena de páginas en esa red social se dedica a recopilar ejemplos creados por los usuarios. Una tiene más de 460.000 seguidores y cada una de sus publicaciones registra miles de reacciones. La mayoría de estas páginas comenzaron a publicar los memes a principios del 2017, aunque ya habían surgido algunos ejemplos al menos desde finales de 2016 en otras páginas de humor y memes en México.
En una de las páginas de Skin-O-Meter se publicó una respuesta a aquellos que califican al meme de ofensivo y racista. Del lado claro colocaron un emoji de una carita riendo a carcajadas y del lado oscuro los comentarios que denuncian el mensaje de las bromas. “Se puede justificar como una ocurrencia, algo inocente, pero entre broma y broma, el mensaje sigue alimentando las ideas de la sociedad mexicana sobre el estatus y el color de la piel”, explica Carrillo, también autor del libro El racismo en México: una visión sintética.
Las bromas y comentarios que denotan esta discriminación han existido mucho antes que el meme, agrega el investigador. “Todos hemos escuchado la frase hay que mejorar la raza. Cuando en Puebla el gobernador era un hombre moreno, sería ser un chico fresa, pero en realidad era un chicozapote. Es un recordatorio constante de que no importa cuánto dinero o prestigio puedas acumular, sigues teniendo el mismo tono de piel”.
Para Bautista, también socióloga y zapoteca de Oaxaca, el racismo se manifiesta de forma sutil en el México cotidiano. “Se ve en las miradas despectivas, en los tratos distintos y falta de oportunidades hacia la gente de tez morena y de origen indígena. También se refleja en las frases de las mamás, como, quítate del sol porque te vas a poner bien prieta. El meme es una forma cruda de lo que sucede de forma sutil en esas interacciones cara a cara”.
Carrillo asegura que existe una tendencia entre los mexicanos de admitir el clasismo en su sociedad pero no el racismo. “Es cierto que los mexicanos somos resultado de la mezcla de muchas razas, pero el mestizaje se aprecia de forma vertical, no horizontal”, dice. “La gente aspira hacia un mestizaje que resalta su lado europeo, pero niega u oculta su lado indígena. Todos siempre dicen que tienen un abuelo español, pero si el abuelo es de origen zapoteco, eso nunca se presume”.
Ambos investigadores coinciden en que reconocer el racismo no es tan fácil en México, como en otros países. “Todavía tenemos un problema de autoaceptación y admitir el racismo implica reconocer y aceptar nuestro lado indígena”, apunta Carrillo. “Todavía persisten tantos conceptos peyorativos hacia la cultura indígena, que se sigue percibiendo como algo negativo”.
Con información de: Verne México