Arrestan a dreamer mexicano, guardias se burlan de él porque usa prótesis en una pierna

En el centro de detención, un guardia «bromeó» y dijo que podrían colocar una escoba en lugar de la prótesis para que Felipe la usara para barrer. 

Regeneración, 15 de noviembre de 2017.- Los agentes de Inmigración y Aduanas (ICE), detuvieron a Felipe Abonza López, un dreamer de origen mexicano.

El joven de 20 años fue detenido el pasado mes de octubre, cuando conducía un automóvil con varios familiares indocumentados y, aunque Felipe no tiene ningún antecedente criminal, fue arrestado y  permanece en un centro carcelario en la localidad de Pearsall, Texas.

Aunque la administración Trump prometió que no iría tras los dreamers, este caso ha mostrado que no es así.

Felipe llegó a Estados Unidos cuando tenía 5 años de edad, no tiene una pierna y utiliza prótesis. En una carta escrita por él mismo y difundida por la organización RAICES, contó que solicitó asistencia médica porque le dolía una de sus piernas a causa de la prótesis y que el empleado del consultorio y un guardia se burlaron de él y bromeaban en inglés, como si no entendiera.

El guardia dijo al empleado: «Puedes ponerle una escoba en la pierna y él puede usarla para barrer», escribió el joven en la misiva.

Lynn Tramonte, de la organización America’s Vice, dijo que “el caso de Felipe Abonza López es solo la última muestra de que la misma administración de Trump, que terminó con DACA, ahora se está enfocando en los dreamers, deteniendo y deportando a cualquier persona con la que se crucen”.

Cada día, aproximadamente 122 dreamers pierden el estatus de protección que ganaron con DACA, programa implementado por Barack Obama en junio de 2012 para ofrecer cobertura legal a casi 800 mil jóvenes indocumentados que llegaron a aquel país cuando eran sólo unos niños.

Ahora, el caso de Felipe se suma al de la niña Rosa María Hernández, también de origen mexicano y con 10 años de edad que padece parálisis cerebral, quien fue detenida tras una operación de cálculos en la vesícula en un hospital de San Antonio, Texas.

La menor ya fue liberada y entregada a sus padres, pero su caso dejó ver el carácter inhumano e indiscriminado que aplican los agentes de la patrulla fronteriza o de Inmigración y Aduanas (ICE) como parte de la campaña que ha lanzado la administración Trump.

“La urgencia ahora es para Felipe y para miles de otros jóvenes inmigrantes que necesitan que el Congreso resuelva el estado de Dreamers este año”, señaló Lynn Tramonte.

 

 

Con información de  La Jornada