AMLO fue el único con quien los empresarios acordaron reunirse tras el 1 de julio, día de las elecciones del 2018.
Regeneración, 07 de junio de 2018.- Más allá de si Andrés Manuel López Obrador y los empresarios del Consejo Mexicano de Negocios (CMN) hicieron las pases, se nota la voluntad política y la diferencia de trato entre el tabasqueño y los otros dos aspirantes a la Presidencia, resaltó Luis Miguel González, director editorial de El Economista.
Según González, en la “pasarela” de candidatos que organizó el CMN tuvo un trato “parejo” para todos, “es muy claro que hay ‘unos más iguales que otros’ (Orwell dixit). El hecho de que AMLO encabeza las encuestas marcó algunas diferencias. Con él, quedó la propuesta firme de reunirse después del 1 de julio e integrar grupos de trabajo”.
También Reforma, habla de equipos de trabajo; en su columna Templo Mayor de hoy, 07 de junio, el diario da cuenta de que el presidente de Cinépolis, Alejandro Ramírez, confirmó que “están armando un equipo de trabajo con Alfonso Romo… si es que López Obrador gana la elección”.
A la reunión, de la que tanto se ha hablado, López Obrador llegó a las 9:00 horas y se fue a las 11:30; aunque había comida para desayunar, declinó la oferta argumentando que ya había desayunado, según indicó Milenio en su Trascendió del 06 de junio.
“¿Qué falta? La cordialidad y el respeto que afloró en este encuentro no sirven para remplazar la confianza. Los grandes empresarios desconfían de López Obrador y el candidato desconfía de ellos”, indica González.
Pese a las diferencias entre el tabasqueño y los empresarios, también hay puntos de coincidencia.
“Quedó claro que hay puntos de coincidencia, como la necesidad de incrementar la inversión productiva del sector privado y la preservación de la estrategia de apertura comercial. Las diferencias quedaron claras en asuntos como la propuesta del campo de López Obrador. No gusta a los empresarios lo de retomar los precios de garantía y la retórica de la autosuficiencia alimentaria. En el tema educativo, hay un abismo entre López Obrador y los grandes empresarios, sobre todo en la forma de entender lo que se debe hacer con la reforma educativa”, indica González.
Mientras se acerca la fecha de la elección y las encuestas siguen colocando a AMLO como el primer lugar de intención del voto, más se reduce la distancia entre ellos.
Vía El Economista