Cunde indignación por medalla a Patrocinio González en Chiapas

Medalla «Miguel Álvarez del Toro» a exgobernador Patrocinio González Garrido. Protestas e inconformidad por asesino, represor y saqueo económico de Chiapas

Regeneración, 13 de agosto del 2018. En sesión solemne le fue entregada la medalla «Miguel Álvarez del Toro», al exgobernador de Chiapas, Patrocinio González Garrido, «por su trayectoria y gran valor», de manos del actual gobernador Manuel Velasco Coello. Lo anterior fue decidido por los diputados local. Organismos sociales y defensores de derechos señalan que el gobierno de Patrocinio González fue uno de los mas represores que ha tenido la entidad.

Miguel Álvarez del Toro, nació en Colima; en Chiapas se distinguió por crear las primeras áreas naturales protegidas y dirigió desde 1944 hasta agosto de 1996, dirigió el Instituto de Historia Natural del Gobierno del Estado de Chiapas.

El exgobernador priísta fue laureado con dicho reconocimiento a iniciativa de sus compañeros del Partido Revolucionario Institucional (PRI),  en el legislativo y mismo que fue aprobado por unanimidad.

Patrocinio, el peor represor

Sin embargo, las protestas no se hicieron esperar, toda vez que el gobierno de Patrocinio González Garrido fue uno de los gobierno más represivos en Chiapas.

Patrocinio González Garrido es, sin duda, uno de los gobernantes intolerantes y represores más sangrientos de Chiapas.

«En su haber pesan alrededor de 50 asesinatos. Tres contra periodistas y al menos 13 contra personas de la diversidad sexual, todos ellos documentados por organizaciones como Amnistía Internacional», publicó Héctor Estrada en Vía Libre.

Estrada postuló que «no indignarse ante el cinismo del Congreso de Chiapas y las declaraciones del presidente de la Mesa Directiva, Williams Oswaldo Ochoa Gallegos, quien catalogó a González Garrido como “un hombre comprometido con la igualdad y el estado de derecho en Chiapas”, resulta francamente imposible. Patrocinio González Garrido es un asesino impune y premiarlo por  el mérito que sea resulta insultante».

Por su Ley de Veda, cientos de indios fueron encarcelados por el solo hecho de cortar troncos de un árbol o poseer un hacha, mientras empresas talamontes dejaron tirados 7 millones de metros cúbicos de maderas preciosas en la región de Marqués de Comillas.

Se ignora el destino de millones de dólares que diversos organismos internacionales, como la UNESCO, para la protección de la selva chiapaneca, considerada uno de los pocos pulmones que quedan en el mundo (Proceso).

Las protestas de la sociedad 

https://www.facebook.com/TiempoyFormaChiapas/videos/2101632400092434/

Un dinosaurio enriquecido y una sublevación indígena

A raíz del levantamiento armado de 1994, se hizo más visible aún el carácter represor y saqueador de los gobiernos del PRI en Chiapas, precisamente encarnados en la figura de los exgobernadores Patrocinio González , así como de Absalón Castellanos.

LEER MÁS:  ¡Otro traidor! Alito Moreno pide intervención extranjera mientras enfrenta acusaciones de corrupción

Precisamente, la revista Proceso publico, el 12 de febrero de 1994, una entrevista, firmada por la redacción donde se retrata al personaje, emblemático dinosaurio del viejo PRI, de la cual entresacamos algunos puntos esenciales:

Como gobernador de Chiapas, Patrocinio González Garrido no sólo se distinguió por violar los derechos humanos de sus paisanos.

“Jamás nadie hubiera imaginado que, a finales de 1988——dice el periodista Jorge Enrique Hernández Aguilar—, a la par de la planeación de un proceso electoral con miras a instalar en la gubernatura de Chiapas al licenciado Patrocinio González Blanco Garrido, también se establecían los cimientos de la más grande fortuna personal en el sureste”

En efecto Bancos, hoteles, restaurantes, un periódico y hasta una línea comercial de aviación forman y fueron parte de esta historia Dice el subdirector del Diario de Chiapas:

“El terror solamente fue un buen pretexto para la construcción del imperio económico A través de esta presencia, bajo un aparente respeto a las leyes, don Patrocinio estableció sus propósitos de enriquecimiento inexplicable”

Prueba de ello es que, recién ha trascendido, tan pronto cayó su “estrella” política, Patrocinio vendió hace dos semanas todas sus acciones de Aviacsa en 5 millones de dólares a un grupo empresarial regiomontano.

«Uno de los actos de corrupción del exgobernador fue utilizar para su provecho personal alrededor de 16,000 millones de pesos, una de tantas cantidades que le fueron entregadas para su campaña política de 1988», se puntualiza.

Según Hernández Aguilar,  “de por sí, don Patrocinio ha sido por estirpe un hombre rico, pero como la vieja historia de Rico Mac Pato, con su moneda política de la suerte siguió consolidando su fortuna».

“Lo más curioso es que este imperio económico ahora se ha legitimado a través del lavado de dinero.

¿Qué chiapaneco podría demostrar que el capital del Banco Regional, que el hotel que se ha edificado alegremente (obra que en Tuxtla Gutiérrez es calificado de monumento a la corrupción), que las plataneras más importantes del Soconusco, que el periódico son propiedad de Patrocinio?.

“Nadie podría demostrarlo —sostiene el columnista— Los amarres con los hombres de papel, la experiencia de sus controladores, encabezados por Moreno Genis, hacen difícil, si no imposible, el desenmascaramiento del verdadero propietario de la corporación.”

Lo que no se puede ocultar, agrega, es la amplia condena histórica del pueblo de Chiapas

“Todos saben y sabían y han sabido que la más importante obra de don Patrocinio fue la de saquear y proteger el saqueo del presupuesto público de los chiapanecos”

Patrocinio «metió a la cárcel a más de 690 campesinos que reclamaban tierras y, nuevamente, designó como coordinador en jefe de todas la policías del gobierno del estado a Ignacio Flores Montiel Y otra vez afloró la corrupción

“Asaltos con botines millonarios, homicidios múltiples, en distintos sectores del estado, de gente connotada a nivel político También empezó una nueva era, la de los secuestros de gente pudiente por la que se pidieron rescates millonarios —40 millones de nuevos pesos entre 1992 y 1993—.

Empezaron a aparecer chivos expiatorios del sistema y la industria del narcotráfico asentó sus reales.  

Por su estilo de gobernar, a González Garrido se le puso el sobrenombre de “Latrocinio” Y es que promulgó el Código Penal “más represor en la historia de Chiapas”:

Denunciar a funcionarios se castigaba como difamación o calumnia Impuso delitos como el de rebelión, conspiración y sedición, e impidió la libre manifestación de las ideas Cualquier reunión podía ser considerada ilegal

Fue famosa su Ley de Veda, por la que cientos de indios fueron encarcelados por el solo hecho de cortar troncos de un árbol o poseer un hacha, cuando los grandes talamontes casi acabaron con la selva. Por ejemplo, Corporación Forestal de Chiapas (Corfo), que se dio el lujo de dejar tirados 7 millones de metros cúbicos de maderas preciosas en la región de Marqués de Comillas

“Expropió más de 30,000 propiedades alegando o pretextando causas de utilidad pública; se hizo de infinidad de bienes y, además de convertirse en socio mayoritario de AVIACSA (Aviación de Chiapas), lo fue también de la empresa Flores Castillo, la cual, de entrada, se fortaleció con la compra de la compañía paraestatal Caminos de Chiapas, adquirida a precio irrisorio.

“Posteriormente expulsó del estado a la trasnacional ICA (Ingenieros Civiles y Asociados) para que sus empresas se adjudicaran, sin concurso, todas las obras de infraestructura en la entidad”, resalta la investigación.

Imposible precisar los innumerables abusos de poder en que incurrió José Patrocinio González Garrido Basta señalar que se ignora el destino que tuvieron millones de dólares que diversos organismos internacionales, como la UNESCO, le entregaron para aplicar durante su gobierno en la protección de la selva chiapaneca, considerada uno de los pocos pulmones que quedan en el mundo.

 

LEER MÁS:  ¡Otro traidor! Alito Moreno pide intervención extranjera mientras enfrenta acusaciones de corrupción