La yegua Mixtli fue hallada en un lienzo charro de Chimalhuacán, tirada en el piso, fue abandonada por no poder jalar más carga.
Regeneración, 30 de agosto de 2018.- La yegua Mixtli tiene en el lomo una enorme herida que involucra músculos, una infección en el hueso y daño en ligamentos; durante toda su vida, fue expuesta a maltratos hasta que se desvaneció en la calle y la abandonaron en el lienzo charro de Chimalhuacán, de donde fue rescatada el pasado 19 de agosto.
Fue asegurada por la Procuraduría de Protección al Medio Ambiente del Estado de México (Propaem) y más tarde trasladada a la facultad de Veterinaria de la UNAM, donde la atienden, reportó El Universal.
Mixtli, que en náhuatl significa “nube”, fue el nombre que le pusieron a la yegua, que “flota” entre la vida y la muerte; ella, igual que miles de yeguas, caballos, burros y mulas fue utilizada para recoger y transportar basura hasta que se desmayó de cansancio y no pudo volver a levantarse.
Su estado es grave: una enorme herida de 30 por 20 centímetros se exhibe en su lomo, e involucra músculos, una infección en el hueso y daño a ligamentos; esa herida se dio por el arnés inadecuado que le ponían sobre la herida, para llevar a cabo largas jornadas de trabajo. No sólo eso, además está enferma de las vías respiratorias y desnutrida.
El médico veterinario de cabecera de Mixtli, José Luis Velázquez Ramírez, explicó la situación que pasa Mixtli.
“Hemos recibido múltiples casos de animales desnutridos y maltratados. Mixtli, su principal problema era una herida en la región de la cruz de más de 30 centímetros de longitud y probablemente 15 a 20 centímetros de ancho que involucra músculos, una infección en el hueso y dañó ligamentos. Es un problema crónico, probablemente asociado a trauma múltiple en esa región y aunado a eso se le detectó que tosía, tiene problemas en un pulmón”, dijo.
Por el momento, la yegua permanece en observación y se recupera lentamente; su tratamiento asciende a 50 mil pesos mensuales y pese a las donaciones, todavía falta dinero para ayudarla, pues podría permanecer entre dos o tres meses en tratamiento médico.
Mixtli es uno de los casos graves, pero no el único, desgraciadamente, en todo el país se repiten las historias de maltrato animal hacia caballos, yeguas, burros y mulas que son obligados a jalar carretones en condiciones precarias.
“Se les trata como si fueran desechables. El équido trabaja hasta la muerte y come sólo lo suficiente para tener capacidad de levantarse. Los (caballos) carretoneros están casi todos muy mal en condición corporal. Son tratados peor que cosas porque a una cosa se le da más valor. Viven en sufrimiento absoluto y el día que se cae, lo levantan a golpes y, cuando ya no pueden volver a trabajar, los matan sin condiciones y los envían a rastros clandestinos. Es una vida muy miserable”, lamentó Emmanuel Pedraza Reyes, director general de Defensoría Animal A.C.
Además de que la situación de los animales es malísima, la mayoría de las personas que trabajan con ellos, también padecen necesidades imperiosas, lo que no justifica el maltrato, pero da una visión más amplia de la necesidad de intervención de autoridades.