Bolsonaro renovó ataques contra reservas naturales de Brasil, ganaderos y mineros interpretan autorización para invadir, incendiar o atacar
Regeneración, 31 de agosto del 2019. Bolsonaro vuelve a incitar ataques: “Hay mucha tierra para poco indígena”. El presidente Jair Bolsonaro, del Partido Social Liberal (PSL), volvió a hacer declaraciones contra la demarcación de territorios indígenas y ha afirmado que pretende revisar las áreas destinadas a las comunidades ancestrales.
Las reiteradas declaraciones de Bolsonaro sobre este tema pueden incitar a invasiones, ataques e incendios contra territorios indígenas por parte de ganaderos.
Mismos que se sienten autorizados por el presidente de la República.
Esto tal como han denunciado ambientalistas, los propios pueblos originarios e instituciones de Brasil e internacionales.
Brasil de Fato, señaló que en diversas localidades del país se registra un incremento en el número de ataques.
Esta semana la Fiscalía General de Pará [región norte del país] emitió una alerta de que mineros ilegales estarían amenazando a indígenas de las tribus xikrin.
Mismas que se ubican en el sudeste del Estado y solicitó ayuda de la Policía Federal.
En Mato Grosso, los incendios destruyeron casi todo el territorio indígena Areões, habitado por Xavantes.
El diario Brasileño indicó que en este contexto Bolsonaro volvió a atacar las demarcaciones este viernes 30:
“Hay mucha tierra para poco indígena y sin lobby. ¿Cuál es el interés detrás de eso? Mi decisión es no demarcar (entregar) más tierras para los indígenas».
Aquellas que fueron demarcadas en forma irregular serán revisadas”, declaró el ultraderechista.
Presupuesto público al mínimo
En otro orden de ideas, pero relacionadas con el desmantelamiento de las políticas sociales Bolsonaro presentó el presupuesto 2020 y recortó a mínimos el gasto público.
Nadie esperaba que el recorte sea tan grande que desde el periódico Folha aseguran que podría provocar un “cierre del gobierno en la práctica”.
Así lo asegura un estudio realizado por el economista Manoel Pires.
A esto por supuesto se le suma la crisis financiera en la que está envuelta gran parte del mundo, entre ellos su socio comercial más importante: Argentina.
Cuyo ministro de Economía, Hernán Lacunza, está haciendo lo imposible para que la inflación no se dispare a números impensados.
Además teniendo en cuenta que ya la economía brasileña se había contraído un 0,2% en el 1er trimestre, indicó por su parte Urgente 24.
Algunos pensaban que Brasil se beneficiaría de que China buscara comprar productos fuera de USA, por la guerra comercial, explicó The Washington Post, pero la caída en los precios de las commodities lo han lastimado.