FOX Y CALDERÓN: EL PEMEX DE LOS AMIGOS
Por @Signanter
Por décadas, PEMEX ha sufrido terribles desfalcos y saqueos por su alta burocracia. La llegada del Partido Acción Nacional a la presidencia no cambió de ninguna manera esta condición: en su breve paso por PEMEX, César Nava mostró tener mucho ingenio para desfalcar a la mayor paraestatal del país.
Con sólo 27 años, César Nava Vázquez fue nombrado Director Jurídico de PEMEX 2001 por Raúl Muñoz Leos gracias a los buenos oficios de Diego Fernández de Cevallos. En su corta estancia (2001-2003) le encargó litigios laborales, mercantiles, fiscales o penales muy costosos a despachos privados de abogados amigos suyos, a pesar de contar con un centenar de abogados de PEMEX, en claro perjuicio de la paraestatal. El ejemplo más indignante de esto fue encargar al despacho M&T Penalistas el caso “Pemexgate”: el desvío de 1,500 millones de pesos a la campaña presidencial del candidato priísta Francisco Labastida.
Nava también incurrió en una gravísima falta de incompatibilidad de funciones al implicar a PEMEX-Petroquímica en la financiación de la construcción de un túnel en Coatzacoalcos, Veracruz a cargo de la empresa ‘Grupo Básico Mexicano’ cuyo dueño, Emilio Baños, era su entonces suegro.
Por si fuera poco, César Nava incurrió también en un delito de desacato de atribuciones al autorizar el diseño y suscripción de los Contratos de Servicios Múltiples de las empresas privadas Repsol, Petrobras, Teikoku Oil, Technit, Tecpetro, y D&S Petroleum para la extracción y explotación de gas en la Cuenca de Burgos (Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila). El contrato, cuyas cláusulas violan el artículo 27 Constitucional, la Ley Orgánica de Pemex y La Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados con las Mismas fue diseñado por la firma Pricewaterhouse Cooper y avalado por Nava.
Juan Camilo Mouriño le cobró a PEMEX 500 facturas (100 millones d pesos) por medio de su empresa «Ivancar».
La periodista Ana Lilia Pérez, que difundió las pruebas de los cobros de Mouriño a Pemex, fue amenazada. Las amenazas resultaron en exilio. Fuera del país, Ana Lilia ha recibido por su trabajo un premio del Club de Periodistas de México (en junio pasado), así como el premio Leipziger Medienpreis 2012
En mayo del 2008 el gobierno calderonista exoneró arbitrariamente a Juan Camilo Mouriño. Tras su muerte, Felipe Calderón le rindió honores nacionales y realizó costosas ceremonias públicas a su memoria.
César Nava nunca fue enjuiciado por las violaciones constitucionales que perpetró a su paso por Pemex.
Raúl Muñoz Leos, director de Pemex en los primeros años del foxismo, nunca fue acusado por las irregularidades en que incurrió en la otorgación de contratos petroleros a empresar privadas. Fue, en cambio, investigado por firmar el convenio 10275/2004, mediante el cual Pemex transfirió casi 8 mil millones de pesos al Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM). El convenio se firmó a puerta cerrada en una reunión prácticamente secreta en la que estuvieron Raúl Muñoz Leos, el entonces abogado general de Pemex, Juan Soriano Rosas, y el dirigente del sindicato petrolero, Carlos Romero Deschamps.
En 2007 la Secretaría de la Función Pública inhabilitó por 10 años a Muñoz Leos y a un ex abogado general de Pemex y les impuso una multa de 864 millones 738 mil 400 millones de pesos. Pero los acusados, mediante recursos legales, resultaron exonerados y la multa jamás fue pagada.
(Con información de Camisas azules, manos negras: el saqueo de Pemex desde Los Pinos, de Ana Lilia Pérez)