EPN y su gabinete consiguieron un amparo contra cualquier acción del gobierno de Chihuahua, por corrupción.
Regeneración, 17 de octubre de 2018.- “El miedo no anda en burro”, dice el dicho, y parece que aplica para Enrique Peña Nieto y su gabinete, quienes solicitaron un amparo motivados por el miedo, indicó para Reforma el Fiscal General de Chihuahua, César Augusto Peniche.
Hoy se difundió la noticia que desde el 11 de octubre pasado, la Consejería Jurídica de la Presidencia solicitó un recurso ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para reclamar posibles órdenes de aprehensión, arraigo, citatorios, averiguaciones o carpetas de investigación abiertas por las autoridades locales de Chihuahua.
Se amparará Peña Nieto y gabinete contra investigaciones penales de Chihuahua
«La presentación de una demanda de amparo de autoridades federales, es un serio indicativo de que en esa instancia de gobierno hay conciencia de la corrupción sistemática en que se vieron algunos de ellos involucrados, con transferencias a estados y para actividades políticas que ha denunciado el Estado de Chihuahua», indicó Peniche.
«Esta solicitud de amparo es un reconocimiento a la labor que se hace en Chihuahua en el combate a la corrupción y del temor que hay, para los que saben que algo hicieron, de que les alcance la acción de la justicia».
Desde antes, Javier Corral, actual gobernador de Chihuahua, indicó que iría contra el gobierno federal por el caso del ex dirigente del PRI, acusado de peculado por el caso del exsecretario general del PRI, Alejandro Gutiérrez, quien está acusado de peculado por 250 millones de pesos.
Pero antes de salir de funciones, tanto Peña Nieto como todo su gabinete podrán saber si Corral interviene directa o indirectamente, de manera pública o privada, actual o inminente en “investigaciones, averiguaciones, carpetas de investigación, solicitudes de información, órdenes de investigación y solicitudes de colaboración que refieran, mencionen o relacionen actuales o anteriores funcionarios públicos federales».
Peña Nieto y su equipo, sin embargo, no sólo están amenazados por Chihuahua, sino por varios ciudadanos que