Antártida alcanzó los 20.75 grados centígrados (69.35 Fahrenheit). Advierten graves consecuencias que podrían tener en el aumento del nivel del mar
Regeneración, 13 de febrero del 2020. Antártida. La región superó los 20 grados centígrados por primera vez en su historia, lo que se ha visto reflejado en la falta de nieve en la zona.
Especialistas advierten de las graves consecuencias que los desprendimientos de hielo podrían tener en el aumento del nivel del mar.
Los científicos en la Antártida han registrado una nueva temperatura récord de 20.75 grados Celsius (69.35 Fahrenheit).
Rompiendo así la barrera de 20 grados por primera vez en el continente, dijo un investigador.
Una base de investigación en la Antártida ha registrado la temperatura más alta para el continente en medio de la creciente preocupación por el calentamiento global.
Dicho calentamiento ha provocado un aumento en la fusión de las capas de hielo alrededor del polo sur.
La base de Esperanza en el extremo norte de la península antártica registró una temperatura de 18.3 grados Celsius (64.94 grados Fahrenheit).
Es decir, la más alta registrada, dijo el viernes la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
“(Esta) no es una figura que normalmente asociarías con la Antártida incluso en verano. Esto superó el récord anterior de 17.5 grados C, que se estableció en 2015 ”, dijo la portavoz de la OMM, Clare Nullis, a periodistas en Ginebra.
Rápido calentamiento
“La península antártica … se encuentra entre las regiones de calentamiento más rápido del planeta. Escuchamos mucho sobre el Ártico, pero esta parte particular de la península antártica se está calentando muy rápidamente ”
Los 20,75º C en la isla de Seymour superan en casi un grado el récord anterior
En Esperanza también se ha registrado la temperatura más alta en la Antártida continental
La marca es «increíble y anormal» para los científicos
La Antártida sigue derritiéndose a pasos agigantados.
Y es que por primera vez desde que hay registros ha superado los 20º C de temperatura, lo que ha activado todas las alarmas en el mayor depósito de hielo del mundo.
Los 20,75º C registrados por científicos brasileños en la isla de Seymour el pasado 9 de febrero superan en casi un grado el anterior récord de 19,8 grados que se alcanzó en la Isla Signy en el lejano enero de 1982.
Pero hay más:
Otra estación registró 18,3º C en Esperanza el pasado 6 de febrero, la lectura más alta en la península antártica continental, según recoge ‘The Guardian’.
Aunque estos registros aún tienen que ser confirmados por la Organización Meteorológica Mundial, están en línea con la tendencia general en la península y sus islas más cercanas.
Mismas, que se han calentado casi 3 grados desde la era preindustrial, lo que supone una de las tasas más rápidas del planeta. Para lo científicos, el nuevo récord es «increíble y anormal».
8 de febrero del 2020. Cambio climático: Antártida alcanza récord de los 18.3°C
Antártida: Organización Meteorológica Mundial informó que extremo norte de península Antártica superó los 17.5ºC alcanzados en marzo del 2015. Preocupación
Regeneración, 8 de febrero del 2020. Antártida. La agencia de noticias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) llamó la atención sobre el aumento de la temperatura en la Antártida.
Se trata del informe de la Organización Meteorológica Mundial.
Dicha organización, basándose en los registros del Servicio Meteorológico Nacional de Argentina, informó este viernes que el extremo norte de la península Antártica batió ayer su récord de calor al alcanzar los 18,3ºC.
Esto es superando los 17,5ºC alcanzados el 24 marzo de 2015.
Durante los últimos 50 años, la península Antártica (el extremo noroeste cerca de Sudamérica) es una de las regiones del planeta que se está calentando más rápido.
Con un aumento de casi 3°C, provocando que la cantidad de hielo derretida se multiplicara por seis entre 1979 y 2017.
Verificación y estudio
A continuación, un Comité de la Organización ha de verificar si se trata de un nuevo récord para el continente antártico, definido como la mayor masa glacial.
La Organización Meteorológica Mundial destacó que la comprobación de este registro en la Antártida es importante ya que ayuda a construir un escenario del tiempo y el clima.
Esto “en una de las últimas fronteras de la Tierra» y que, al igual que el Ártico, está escasamente estudiada en cuanto a observaciones y pronósticos meteorológicos.
Agregó que ello, “pese a que ambos juegan un papel importante en el control de las pautas climáticas y oceánicas y en el aumento del nivel del mar”.
La Antártida ha registrado temperaturas récord.
Sin embargo, especificó que “el récord de la región antártica, es decir, en toda el área al sur de los 60 grados de latitud sur, es de 19,8ºC y se tomó en la Isla Signy en enero de 1982”.
La OMM explicó que la Antártida cuenta con una extensión de 14 millones de km2 (aproximadamente el doble del tamaño de Australia), es fría, ventosa y seca.
Su temperatura media anual oscila entre los -10°C en la costa antártica y -60°C en las partes más elevadas del interior.
Su inmensa capa de hielo tiene hasta 4,8 km de espesor y contiene el 90% del agua dulce del mundo.
«…, suficiente para elevar el nivel del mar unos 60 metros si se derritiera»- indicó ONU noticias.
El grave impacto en los glaciares
Del mismo modo, alertó que durante el pasado medio siglo cerca del 87% de los glaciares de la costa oeste de la península Antártica han retrocedido.
Se aclara que la mayoría de ellos en un proceso acelerado en los últimos 12 años.
A modo de ejemplo, destacó las imágenes satelitales que demuestran que las dos grietas del glaciar Isla Pine han crecido rápidamente en los últimos días hasta alcanzar aproximadamente una extensión de 20 km de longitud.
Las grietas fueron vistas por primera vez a principios de 2019,
Este glaciar está considerado como una de las principales arterias de hielo de la Antártida Occidental.
Antártida: localizan punto terrestre más profundo del planeta
Científicos lograron calcular un valle cubierto de hielo de tres kilómetros y medio de profundidad y su estudio servirá para estudios climáticos
Regeneración, 13 de diciembre del 2019. Un cañón repleto de hielo con una profundidad de tres kilómetros y medio y se encuentra en la Antártida es el punto más profundo sobre la superficie terrestre, según reveló un grupo de investigadores de la Universidad de California Irvine.
Este hallazgo se encuentra debajo del glaciar Denman y está incluido en un nuevo mapa del llamado “continente blanco” de nombre Bed Machine Antartic, o “la máquina del fondo antártico”.
Comparable con valles oceánicos
Este cañón lleno de hielo tiene una profundidad de tres mil 500 metros debajo del nivel del mar.
Un valle sólo comparable a los que existen dentro de algunos océanos.
«Este es sin duda el retrato más preciso hasta ahora de lo que se encuentra debajo de la capa de hielo de la Antártica», dijo Mathieu Morlighem.
Descubrimientos clave
El profesor del Departamento de Ciencias de Sistemas Terrestres de la Universidad de California Irvine, trabajó en este proyecto durante seis años.
Y estos descubrimientos resultarán claves para la comprensión de cómo el sur polar podría cambiar en el futuro.
En los años previos, los instrumentos de radar han monitoreado la Antártida, enviando microondas para ver a través del hielo y rastrear la topografía de roca subyacente.
Intentos previos
Pero todavía hay vastas áreas en esta zona de la Antártida sobre las cuales hay poca o ninguna información.
«Ha habido muchos intentos de sondear el lecho de Denman, pero cada vez que sobrevolaban el cañón, no lograban verlo en los datos del radar», explicó el investigador.
Morlighem utilizó los principios de la física para llenar esos vacíos.
Método de cálculo
Por ejemplo, si se sabe cuánto hielo está entrando en un valle estrecho y qué tan rápido se está moviendo, el volumen de ese hielo se puede calcular.
Con esto se puede una idea de la profundidad y la aspereza del fondo oculto del valle.
Gracias a este método se pudo calcular que en el glaciar Denman, de 20 kilómetros de ancho, el hielo desciende a más de 3 mil 500 metros bajo el nivel de mar.
Generarán discusión
«Las fosas en los océanos son más profundas, pero este es el cañón más profundo en tierra firme», dijo Morlighem.
Es posible que gran parte de lo que muestra el mapa de Morlighem no se vea a primera vista tan diferente de otros mapas de la Antártida.
Pero una vista más detallada muestra algunos detalles fascinantes que generarán una discusión considerable entre los expertos en temas polares.
Una cresta debajo
Por ejemplo, a lo largo de las Montañas Transantárticas hay una serie de glaciares que atraviesan la meseta oriental del continente y se alimentan del Mar de Ross.
Los nuevos datos muestran que debajo de estos glaciares se encuentra una cresta.
Esto será importante si en un futuro el calentamiento desestabiliza la plataforma flotante de hielo que actualmente se encuentra en la parte superior del Mar de Ross.
Cresta estabilizadora
Normalmente se espera que la eliminación de esta plataforma acelere el flujo hacia los glaciares.
Así, la cresta funciona como un estabilizador que protege el hielo que fluye a través de las montañas transantárticas.
«Si algo le sucede a la plataforma de hielo marino de Ross, en este momento está bien».
«Pero si algo sucede, lo más probable es que no provoque el colapso de la Antártida Oriental a través de estas ‘puertas’.
Situación estable
«Si la Antártida Oriental está amenazada, no es por el mar de Ross», dice Morlighem.
Las montañas Transantárticas está atravesadas por una cresta de hielo.
En contraste con la situación estable en las montañas transantárticas, el mapa muestra que hay pocos impedimentos para un rápido retroceso del glaciar Thwaites, que tiene el tamaño aproximado del Reino Unido.
Último retén
A los científicos les preocupa esto porque este glaciar se asienta sobre una base que se inclina hacia la tierra, una geometría que tiende a favorecer la retirada.
El nuevo mapa revela sólo dos crestas que podrían actuar como posibles frenos.
Luego de sobrepasar estar crestas, el retroceso del glaciar que se derrite podría ser imparable.
El nuevo mapa se incluirá en modelos climáticos que intentan proyectar cómo podría evolucionar la Antártida a medida que las temperaturas en la Tierra aumenten.