Por si fuera poco, el autobús chino también está causando un embotellamiento, pues tiene bloqueada una importante red viaria de una ciudad de China
Regeneración, 7 de diciembre de 2016.- El prototipo del Transit Elevated Bus (TEB), un autobús desarrollado en China que se esperaba resolviera el problema de tráfico al transitar sobre los automóbiles está arrumbado, olvidado en algún lado y no se ha movido de ahí.
Como si no fuera poco, también está causando un embotellamiento pues tiene bloqueada una importante red viaria de la ciudad de Qinhuangdao.
El vehículo es vigilado por dos guardias de seguridad que reconocen que los dejaron olvidados ahí también. «Los gerentes de la empresa se fueron hace mucho tiempo y no soy capaz de contactar con ellos», dijo un guardia no identificado.
El fiasco resulta todavía más grande después de toda la expectativa que el bus estaba generando; titulares de periódicos de todo el mundo anunciaban al futurista transporte que pasaba sobre los autos; nadie esperaba este resultado.
A principios de agosto el TEB realizó su primera prueba acompañada de cobertura mediática. Días después, las pruebas se detuvieron y los medios estatales chinos empezaron a referirse al autobús como una gran estafa. Los inversores pidieron que se les devolviera su dinero y comenzaron a llover las críticas públicas.
A pesar de su innovador diseño, los críticos dicen que tiene varios defectos. Por ejemplo, aunque el ancho del bus permite que por debajo de él pasen dos hileras de vehículos, solo los coches que no superan los 2,1 metros de altura pueden pasar libremente. Esto pese a que en la mayoría de las carreteras chinas se permite la circulación de vehículos de hasta 4,2 metros de altura.
También se teme que un autobús de 22 metros de largo sea demasiado pesado para las carreteras en China, que han sufrido frecuentes hundimientos. Además, la altura del autobús podría ser un obstáculo para la evacuación de los pasajeros en caso de emergencia.