Mientras millones de personas siguen a diario los goles del Mundial de Fútbol, en Brasil suceden otras cosas que no tienen nada que ver con los balones, y sí con las personas más vulnerables del país: los indígenas no contactados.
Regeneración, 5 de julio 2014.-Un grupo de indígenas amazónicos ha aparecido en la selva de Brasil, cerca del borde fronterizo con Perú, y ha establecido contacto con otra comunidad asentada y ya contactada. La noticia se produjo pocos días después de que el Departamento de Asuntos Indígenas del Gobierno brasileño (FUNAI) y Survival International, el movimiento global por los derechos de los pueblos indígenas y tribales, alertaran del grave riesgo de que hubiera un incidente de ese tipo, en vista del fracaso de las autoridades peruanas para frenar la descontrolada tala ilegal que se produce en su territorio.
Los indígenas aislados habían ido acercándose cada vez más a la comunidad asentada de los asháninkas que viven junto al río Envira. Las recientes noticias han llegado hace unos días desde la remota región donde los indígenas establecieron contacto con los asháninkas, que llevaban notificando su presencia cercana desde hacía varias semanas.
Por ello, un equipo especializado de FUNAI se encuentra en la zona para proporcionar apoyo al nuevo grupo, que será atendido por unidad médica en el caso de que fuera necesario tratar la propagación de posibles epidemias de enfermedades respiratorias comunes, u otras dolencias frente a las que los grupos de indígenas no contactados no tienen inmunidad.
Nixiwaka Yawanawá, un joven indígena del estado de Acre que se unió a Survival para defender los derechos de los pueblos indígenas, declaró: “Soy de la misma región en la que ellos se encuentran. Resulta preocupante que mis familiares corran peligro de desaparecer. Esto muestra la injusticia que afrontamos en la actualidad. Son incluso más vulnerables porque no pueden comunicarse con las autoridades. Ambos gobiernos deben actuar con la mayor inmediatez para protegerlos y para detener un desastre contra mis hermanos”.
Por su parte, el director de Survival International, Stephen Corry, dice que “tanto Perú como Brasil dieron garantías de que pondrían fin a la tala ilegal y al tráfico de drogas que estaban forzando a los indígenas aislados a desplazarse a otras zonas, pero han fracasado”, porque los traficantes incluso han estado ocupando puestos gubernamentales que les permite monitorear el comportamiento de estos grupos. En su opinión, “los indígenas no contactados se enfrentan ahora al mismo riesgo de genocidio por enfermedades y violencia que ha caracterizado la invasión y ocupación de las Américas durante los últimos cinco siglos”.
Información: Survival International