La tortura a la que habría sido sujeta Lydia Cacho estaría relacionada a un caso de corrupción de menores en fiestas de Kamel Nacif, denunciado por la periodista
Regeneración, 4 de diciembre de 2018. Alejandro Rocha Laureano, policía ministerial de la Fiscalía del Estado de Puebla fue detenido este martes por el delito de tortura contra la periodista Lydia Cacho Ribeiro en 2005.
Elementos de la Procuraduría General de la República (PGR) adscritos a la Agencia de Investigación Criminal (AIC) detuvieron al policía de 53 años en un domicilio de Puebla capital, de acuerdo con un comunicado de la PGR.
El ahora detenido, era requerido por el Juez Segundo de Distrito en el Estado de Quintana Roo.
Rocha Laureano detuvo a Cacho Ribeiro en Cancún, Quintana Roo, en 2005, con una orden de aprehensión en su contra.
Las torturas que se le imputan habrían sucedido durante el traslado de la periodista, desde Cancún a Puebla.
En ese trayecto los policías la habrían amenazado con violarla.
Dicha orden se ejecutó luego de que el empresario mezclillero, Kamel Nacif Borge, presentara cargos contra la periodista por probable comisión de los delitos de difamación y calumnias.
Kamel Nacif presentó estos cargos por la presentación del libro «Los Demonios del Edén», de Cacho, donde se describen fiestas del empresario donde se cometían actos de pederastia y corrupción de menores.
Pronto surgieron grabaciones entre Kamel Nacif, y el gobernador de Puebla en ese entonces, Mario Marín Torres, en las que ambos discutían «ponerle un correctivo» a la periodista.
En las grabaciones, el empresario llamó a Marín Torres «góber precioso», apodo que lo acompaña hasta el día de hoy.
De acuerdo con Milenio, en noviembre de 2007, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) no responsabilizó a Marín de las violaciones a las garantías individuales de Cacho argumentando que éstas no se habían demostrado.
Otros responsables tras las rejas
En agosto de 2018, la justicia mexicana negó la libertad al policía judicial que participó en actos de tortura contra la periodista Lydia Cacho. El agente, de nombre José Montaño, así como Jesús Pérez y otros policías judiciales del Estado de Puebla, profirieron a la periodista agresiones físicas y verbales con un trato sexualizado y discriminatorio durante 20 horas.
José Montaño Quiroz, era en ese entonces comandante de la policía judicial de Puebla, involucrado en el operativo donde además participaron agentes privados de Kamel Nacif.
Como es del conocimiento público, Lydia Cacho publicó el libro «Los demonios del Edén. El poder que protege a la pornografía infantil», en 2004 que trata de la pornografía y la prostitución infantil.