Corea del Sur convocó a una reunión urgente de su Consejo de Seguridad Nacional y analiza los detalles del lanzamiento con Estados Unidos
Regeneración, 23 de agosto del 2019. Corea del Norte disparó este sábado dos misiles balísticos que cayeron al mar en aguas al este de Japón.
Se acuerdo con información del servicio nipón de Guardacostas, es el séptimo lanzamiento que protagoniza Pyongyang desde el 25 de julio.
Los misiles, que Corea del Sur también ha detectado aunque solo los ha descrito como «proyectiles», partieron de la provincia de Hamyong Sur.
Corea del Sur ha convocado a una reunión de urgencia de su Consejo de Seguridad Nacional en Seúl, mientras analiza los detalles del lanzamiento con Estados Unidos.
Según Japón, es improbable que los proyectiles hayan llegado a su zona económica exclusiva en el mar.
El lanzamiento norcoreano es el primero desde que finalizaron las recientes maniobras militares conjuntas entre Estados Unidos y Corea del Sur.
Pyongyang, que ve esos ejercicios como un ensayo para poner fin a su régimen, los había caracterizado como la causa de sus lanzamientos.
Según el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el líder norcoreano, Kim Jong-un, le había transmitido su disposición a reiniciar las interrumpidas negociaciones sobre su programa nuclear una vez hubieran concluido las maniobras.
Los lanzamientos son también los primeros desde que este jueves Seúl anunciara que dejará de compartir directamente información de inteligencia militar con Tokio.
La presidencia surcoreana anunció que su Consejo Nacional de Seguridad se reunirá tras este último ensayo.
Ensayos de misiles
Corea del Norte, país dotado del arma nuclear, llevó a cabo varios ensayos de misiles de corto alcance en las últimas semanas.
Esto en protesta contra los ejercicios militares conjuntos entre Estados Unidos y Corea del Sur, que Pyongyang considera un ensayo para la invasión de su territorio.
La última sesión de entrenamientos concluyó el martes.
El viernes, Pyongyang tachó al secretario de Estado estadounidense, Mike Pomeo, de «toxina intransigente».
Esto sucedió después de que el diplomático norteamericano dijera que Estados Unidos mantendrá las sanciones «más duras» contra el Norte hasta que este se deshaga de su arsenal nuclear.
Las conversaciones entre Pyongyang y Washington sobre la cuestión nuclear del Norte están bloqueadas desde la segunda cumbre entre el líder norcoreano, Kim Yong Un, y, Donald Trump.
Esta reunión se celebró en febrero en Hanói y concluyó sin un acuerdo sobre la desnuclearización del Norte y el levantamiento de las sanciones.
Esta semana, el enviado especial de Estados Unidos para Corea del Norte, Stephen Biegun, aseguró que Washington está «preparado para iniciar las negociaciones» en cuanto tenga noticias de Pyongyang.