El ex jefe de la Policía Federal Ministerial es acusado de ejercer tortura contra uno de los involucrados en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Regeneración, 15 de septiembre del 2020.Un juez federal dictó auto de formal prisión al ex jefe de la Policía Federal Ministerial (PFM) de la entonces Procuraduría General de la República (PGR), Carlos Gómez Arrieta.
Y es que, el ex funcionario es acusado de delitos contra la administración de justicia y tortura en agravio de uno de los sospechosos de la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
De acuerdo al juez de Distrito en Materia de Procesos Penales del Estado de México, determino que la Fiscalía General de la República (FGR) aportó las pruebas suficientes para presumir que Gómez Arrieta participó en los actos de tortura contra Carlos Canto Salgado.
La tortura es un delito grave, por lo cual el ex funcionario quedó internado en el penal de máxima seguridad en el Altiplano en el Estado de México.
Se violó el debido proceso a Carlos Canto Salgado
Cabe recordar que Carlos Canto Salgado fue detenido el 22 de octubre del 2014 por elementos de la PFM y por la Secretaría de Marina. Mientras éste se encontraba durmiendo en casa de sus padres en Iguala, Guerrero.
De acuerdo a los señalado por Canto, no fue llevado ante el Ministerio Público, sino hasta 20 horas después de su detención, lo que violó el debido proceso.
El examen que la PGR realizó a Canto se determinó que éste tenía más de 30 lesiones y dolor intenso en la superficie del costado izquierdo. Dolor que limitaba sus movimientos, tímpanos lesionados y dolor en el cuello.
Los elementos que detuvieron señalaron que las lesiones se debían porque Canto se intento dar a la fuga. Sin embargo, el médico legista señaló que por las dimensiones y características de las lesiones, estás no se produjeron por maniobras de aseguramiento.
Fue en junio del 2019 que a través de un vídeo se dio a conocer como Canto fue sometido a tortura, por lo cual Gómez Arrieta tuvo que renunciar a su cargo. Finalmente, el 11 de septiembre, el ex funcionario se entregó a la FGR, cinco meses después de que se librara la orden de aprehensión en su contra.