El BBVA y el genocidio palestino

Por Plataforma contra el BBVA/Rebelión

Cuando una guerra o conflicto estallan como ahora en Israel (no es ninguna de las dos, es un ataque indiscriminado, pero por aludir a los muertos causados por las armas) se nos confirma, que sí, que las armas que aquí (Euskal Herria) se fabrican y su financiación y comercialización sí causan muerte y destrucción. También que el vendérselas a un ejército como el israelí es una negligencia sin parangón pues sí se utilizarán pero además de forma indiscriminada, contra población civil, hospitales, escuelas, niñ@s, etc con lo que queda patente el genocidio que tiene lugar. No se puede tolerar, y si bien el poner fin a la fabricación de objetos y tecnologías tan asesinas sería el objetivo principal, habría otros también necesarios como el boicot que exigen los movimientos y organizaciones sociales del mundo y sobre todo el embargo de armamentos. El Ejército israelí está entre los cuatro mayores del mundo, con 1.800.000 soldados y el más avanzado armamento y tecnología militar, la mayoría fabricado y financiado en otros países incluido el estado español. 

gaza

Por otro lado, a la hora de decretar un embargo de armamento o de prohibir la comercialización a empresas y bancos, hay que tener en cuenta lo antiguo y redundante de estos ataques y la desproporción de estos. Este bombardeo, en un conflicto y ataque muy antiguo y que no cesa, tiene como precedentes más cercanos los bombardeos también a Gaza de 2008-2009 donde 1.400 palestinos fueron asesinados (frente a catorce israelíes) y los de 2012. Por lo tanto, hay precedentes e indicios para que ya se hubieran tomado medidas e impedido la continuación de la comercialización y financiación de armamento (no sólo a Israel sino en general, claro). 

Claro está, la presión la debemos hacer contra esos que mantienen lazos con el gobierno y ejército israelí, sobre todo para proveerles de armas. Uno de los principales bancos del estado español (esta semana aún más grande tras adjudicarse Catalunya Banc en otro pelotazo), el BBVA, es uno de los principales financiadores de la industria y de la comercialización armamentística, incluyendo Israel. 

Es importante subrayar que sólo conocemos muy, muy poco sobre las exportaciones pues estas están sujetas a secretismo (los destinos y compradores no son públicos), y las únicas de las que tenemos conciencia son las realizadas en Italia que son las únicas cuya publicación es obligatoria. Pero como sería una coincidencia que sólo financiara la única de la que se conocen datos, podemos concluir que habrá muchas más cuyo conocimiento se nos escapa. En el 2006 BBVA financió exportaciones de armas italianas por un valor de más de 53 millones de euros, de las cuales tenían como destino Israel armas por un valor de 329.066 euros (Nº Ref 12967). En 2008 fueron casi 39 millones, 30 en 2009, más de 20 en 2010, más de 6 en 2011 y 11,617 millones de euros en 2012. Además, el control económico del BBVA supone una complacencia institucional y mediática con sus actividades y una falta de crítica hacia su quehacer, mientras que su control mediático (grupo Vocento, publicidad pagada, etc) ahonda en esa falta información que mencionábamos, en esta materia y de otros proyectos indeseables. 

El BBVA es el mayor banco español financiador de armas con 26,85 millones de euros en acciones de compañías armamentísticas (el Santander no es muy distinto). Entre ellas: la británica BAE Systems, la norteamericana General Dynamics, que fabrican armas nucleares y de uranio empobrecido, las norteamericanas Boeing, Honeywell, ITT, Jacobs Engineering, McDemott, Northrop Grumman, la européa EADS, y la británica Rolls Royce, que producen armas nucleares, la estadounidense Lockheed Martin, que además de armas nucleares fabrica bombas de racimo y la norteamericana Textron, productora de bombas de racimo y de minas antipersona. También posee bonos de la francesa Thales, que fabrica armas nucleares. 

Pero es que además el BBVA ha concedido préstamos a ocho de estas empresas desde principios de 2006 y ha ayudado a tres compañías en la emisión de bonos: Boeing, EADS, la italiana Finmeccanica (productora de armas nucleares), General Dynamics, Hoyneywell, Lockheeed Martin y McDermott. Todas ellas han suministrado  armamento o tecnología militar al ejército israelí, o participan en consorcios con otras compañías israelíes. 

Compañías financiadas por el BBVA con vínculos militares con Israel 

Como veremos, muchas de las compañías financiadas por el BBVA tienen su base en los Estados Unidos (país en el que el BBVA ha hecho una fuerte apuesta absorbiendo y abriendo sucursales), que además de apoyar al ejército de Israel y tener un lobby sionista muy fuerte, tiene un gran negocio contribuyendo a construir la maquinaria militar israelí. Ambos países firmaron una subvención de Financiación Militar Extranjera anual en 2007 (hasta el 2017) para Israel de los EE.UU. de 2,3 mil millones de euros cada año. Entre ambos países establecieron incluso un método de pago denominado Plan de Pago Diferido (DPP) que se combina con un proceso del Pentágono conocido como financiación con flujo en metálico. 

BBVA financió a la empresa Lockheed Martin con 45 millones de euros y con 27,340 en 2007. En el 2010 financió en dos ocasiones con 90.000 euros y 290.000 euros bonos de esta empresa. Lockheed Martin suministra cazas F-35 y F-16I al ejército de Israel: el primero de los 102 F-16I por valor de 2 billones de euros de llegó en 2003 a Israel. En 2006 Lockheed Martin vendió 100 F-35 por valor de más de 5 billones de dólares. En 2010 vendió otros 20 F-35 y en 2012 obtuvo un contrato de 335 millones de euros para equipamiento de combate para los mismos F-35. Este año ha vendido avión aero-transportador C-130J Super Hércules e Israel le quiere comprar media docena de tiltrotores (parecido al helicóptero) V-22 Ospreys. En 2012 abrió un centro de tecnología para la inteligencia militar (*) israelí en el desierto de Neguev por 156,7 millones de euros, en 2013 anunció sus intenciones de crear una subsidiaria en Israel y este año (2014) abrió un centro de investigación en tecnología avanzada (cibernética, etc) en Beersheba (Israel) conjuntamente con empresas y universidades locales. 

El BBVA prestó dinero a la gigante Boeing que cuenta entre otras con Boeing Defence UK. Los créditos a Boeing en los que participó BBVA y de los que se tiene información corresponden a los años 2010, 2011 y 2012. Los tres créditos tenían como fin refinanciar anteriores deudas y otros propósitos y BBVA participó con 40,7 millones de euros (2010), 62,39 millones de euros (2011) y 686,6 millones de euros (2012). Boeing fabrica elementos aeronáuticos y bélicos y tiene buena relación con el ejército israelí. Recientemente Boeing ha vendido a Israel misiles flecha IAI, misiles Boeing AGM-114D Longbow Hellfire, helicópteros armados 18 AH-64D Apache Longbow, 63 cazas Boeing F15 Eagle, 102 cazas Boeing F16 Eagle, 42 helicópteros armados BOEING AH-64 Apache, aviones F-16 Peace Marble II & III, 4 Boeing 777s, e interceptores Arrow II, 1,000 bombas GBU-9 por 77 millones de dólares. 

BBVA también ha financiado a la mayor compañía de defensa estadounidense, General Dynamics, otra empresa con fuertes lazos con el ejército israelí. En 2013, BBVA participó en un crédito sindicado a General Dynamics de 746,30 millones de euros con una participación de 106,65 millones de euros. Anteriormente financió con 119,41 millones de euros en el 2011 y con 59,70 millones de euros en 2010. En el 2011 General Dynamics firmó un contrato con las fuerzas de seguridad de Israel para tecnología de comunicaciones. También vendió a Israel 170 tanquetas pesadas Namer IFVs (contrato inicial de 386). 

BBVA financió a Lockheed Martin en 2007. En 2010 Amnistía Internacional denunció que Northrop Gruman suministró equipo fundamental utilizado en el anterior bombardeo israelí a GAza [2008 – 2009]. Lockheed Martin y Northrop Grumman fabrican conjuntamente partes del Helicóptero Apache AH64D Longbow, como los misiles Longbow Hellfire II, así como los radares de los aviones F-16. Ambos fueron usados en ataques a civiles libaneses en 2006 y en los de Gaza de 2008–09. En 2007 Northrop Gruman vendió a Israel Aerospace Industries satélites espías por valor de 1,2 billones de euros. 

BBVA financió a Honeywell en 2011 y 2012. BBVA participó en un crédito entre 29 bancos a Honeywell International con 74,63 millones de euros de 2089,63 totales y con 135,90 millones de 2238,89 totales en 2012. Ese mismo año (2012) Israel firmó un contrato con Honeywell por 548 millones de euros para motores de cazas F124. 

BBVA participó en un crédito a Thales en 2010 con 65.60 millones de euros. Thales colabora en proyectos de drones con Elbit Systems de Israel. Estos drones se han utilizado contra población civil en Gaza, como denunció la ONG War on Want en 2012. También trabaja conjuntamente con la israelí Plasan Sasa en vehículos para el ejército. 

También financió a ITT (EDO). EDO-ITT vendió a la Fuerza Aerea israelí ERU-151 (Unidad de Lanzamiento) y ZRFAU (Unidad Zero Retention Force Arming) para los dispositivos de bombardamento de los aviones F16. 

El BBVA participó con 19,3 millones de euros en un crédito sindicado en 2005 entre trece bancos a la empresa Raytheon (valor total: 2.200 millones de euros). Raytheon fabricó las bombas de racimo que finalmente llegaron a prohibirse. Raytheon uno de los mayores proveedores de armas de Israel, como los sistemas actualizados para los misiles Patriot por 122,2 millones de euros.

BBVA participó en un crédito sindicado de 3 billones de euros a la segunda mayor empresa armamentística europea (7ª a nivel mundial) la holandesa EADS. BBVA participaba con 120 millones de euros en el crédito (2005), 240 millones de euros en 2008, con 83 millones de euros en 2010 y con 111,4 millones en abril de 2011, y también con bonos por valor de 3 billones y de 33,58 millones de dólares en 2009. EADS exportó helicópteros armados (Eurocopter) a Israel. En el 2008 BBVA participó en otro crédito a AirTanker de EADS (40%) para el proyecto FSTA, con 240 millones de euros de 16,6 billones totales. Los drones, son una técnología en la que Israel es puntera y que ya ha utilizado en ataques contra Gaza. EADS trabaja en esta tecnología con compañías israelíes: está vinculada con la compañía israelí Malat que fabrica los drones Harfang y junto a la francesa Airbus SAS e Israel Aerospace Industries Ltd en el proyecto SARISTU (Smart Intelligent Aircraft Structures) de un avión semi-robótico, Taxibot. Con Israel Aerospace Industries (IAI) consiguió también un contrato en 2013 para desarrollar sistema de «aviso inicial» para aviones de combate y otro para adaptar el avión armado Heron UAV. Con la también israelí Elta consiguió un contrato para el radar de aviones de combate AESA (Active Electronically Scanned Array). EADS también fabrica armamento nuclear. 

En octubre de 2008, BBVA financió (junto a otras 12 entidades bancarias) con 152,9 millones de acciones a la productora italiana de armas nucleares, Finmeccanica con 1.223,7 millones de euros. BBVA aportó unos 78 millones de dólares. Finmeccanica (a través de su subsidaria Alenia Aermacchi) vendió a Israel 30 jets de combate M-346 en 2012 por valor de 634 millones de euros. El primero iba a ser envíado ahora, en verano de 2014. Finmeccanica también impulsa la tecnólogía de drones. 

BAE Systems es la mayor fabricante de armas británica y la 3ª empresa de defensa mayor del mundo con ventas superiores a los 19,7 billones de euros. BAE Systems trabaja para el ejército israelí y tiene facilidades en Jerusalén. Vendió pantallas de visualización frontal para los aviones F16, utilizados para seleccionar blancos y bombardearlos, y otros sistemas tecnológicos y digitales para estos aviones. Su sistema para aviones de combate fue utilizado también en el bombardeamento israelí de Siria en 2007. 

Por otro lado, BBVA encabezó en 2010 un crédito sindicado de 295 millones de euros destinado a financiar la deuda del grupo industrial Maxam, holding en el que se encuentra Explosivos Alaveses, SA (EXPAL). Expal es fabricante de todo tipo de proyectiles, espoletas, carcasas y bombas y suministra habitualmente al ejército de Israel, y otros ejércitos responsables de crímenes como Turquía en Kurdistán, Iraq y sus minas están presentes en Colombia y Sahara Occidental.

BBVA es accionista de la vasca ITP, perteneciente a Sener, en un 2%. Sener colabora con la empresa israelí de armamento Rafael y diseña los sensores que van en los aviones militares israelíes que atacan a la población civil en Gaza. Estos sensores sirven para localizar y focalizar el objetivo a bombardear. También fabrica diversos componentes del avión de combate europeo Eurofighter y los misiles de crucero Taurus Kepd-350 e Iris-T.

Uno de los pocos resultados de la última masacre israelí en Gaza ha sido la inmaterialización de la compra de la firma israelí de operadores de satélite Spacecom por Hispasat, propiedad en un 10,7% de BBVA. (24 julio 2014)

La ética del BBVA

El BBVA es un banco pionero en el estado en la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) que ya han incorporado todas las transnacionales. Si bien en ella se considera que es su deber el «actuar de forma correcta, ética y eficiente con todos los sectores con los que, directa o indirectamente, nos relacionamos, tomando en consideración equilibradamente todas las dimensiones de nuestra actividad. La económica, desde luego, pero también la humana, la social y la ambiental», como hemos podido comprobar con este caso, esto queda lejos de la realidad. Como más de una vez hemos criticado desde la Plataforma contra el BBVA, la RSC y más concreto la del BBVA y todos sus intentos por transmitir una imagen de responsabilidad (para ello cuenta también con una página web en exclusiva: bancaresponsable.com) no es más que un mero maquillaje que le permite seguir actuando de la misma forma que antes sin hacer nada por subsanar o impedir actividades y financiaciones inaceptables.

Así dice su Código de Conducta recoge “su compromiso con la aplicación del contenido de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, del Pacto Mundial de las Naciones Unidas y con el de otros convenios y tratados de organismos internacionales tales como la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico y la Organización Internacional del Trabajo”.

BBVA además ha suscrito distintas políticas de respeto de los Derechos Humanos como los Principios de Ruggie y otros, que demuestran ser un acto de hipocresía.

Además de ignorar su propios planteamientos, el BBVA ignora los de las instituciones internacionales como la ONU o el Tratado Internacional sobre el Comercio de Armas, aún pendiente de aprobar, que prohíbe la venta de armas a países en conflicto. 

En este caso también debemos denunciar la implicación del gobierno español pues mediante el Ministerio de Industria y Comercio junto al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y los Ministerios de Interior y Defensa están encargados de permitir transacciones en materia de armamento en función de la situación y del posible uso en el país destinatario. Además el artículo 8 de la Ley 53/2007 sobre comercio exterior en materia de defensa prohíbe la venta de armamento a países en una delicada situación política, donde se violan los derechos humanos o existen conflictos armados. Los Principios Generales de Derecho también establecen que es tan responsable de una muerte aquel que la ejecuta como aquel que la promueve, por lo que en este caso que nos incumbe, el BBVA es claramente culpable.

Pero como hemos podido comprobar aquí, las ventas a Israel y la financiación del BBVA nunca se ha puesto en entredicho y el BBVA sigue haciendo negocio directa e indirectamente con este genocidio. 

Fuentes:

www.bbvasensearmes.org 
www.dontbankonthebomb.com/2014/07/23/spain/ 
www.banktrack.org/show/news/bbva_is_the_leading_spanish_bank_in_financing_controversial_arms_producers 
BAnksecrets: www.fairfin.be/files/en/documents/legacy/publications/reports/bbva_en.pdf 
www.facing-finance.org/database/cases/arms-exports-to-conflict-areas-eadswaffenlieferungen-in-konfliktgebiete-eads/ 
www.sindominio.net/singuerra/armas_ee.html

(*) un oximoron, como apunta Arcadi Oliveres

Enviado por http://bbvahiltzaile.blogspot.com.es/2014/07/el-bbva-y-el-genocidio-palestino.html