En el G-20 EEUU y China se acercan para limar asperezas por conflicto

Los mandatarios de EU y China volvieron a tocar el tema del conflicto comercial desatado por balanza comercial y agudizado por política de seguridad de EU
Regeneración 29 de junio de 2019. China. Donald Trump afirmó que las relaciones van “de nuevo por buen camino”, tras reunirse con Xi Jinping, mandatario de China, durante la cumbre del G-20.
Los mandatarios de Estados Unidos y China, Donald Trump y Xi Jinping, acordaron hoy reanudar las negociaciones comerciales durante la reunión que mantuvieron en el marco de la cumbre del G20.

La cumbre se desarrolla en la ciudad japonesa de Osaka.

Esta noticia fue difundida por la agencia oficial china Xinhua.

Los dos países han acordado tratar “temas específicos” para finalizar a la guerra comercial que enfrenta a los dos países desde el año pasado, indica la fuente, que añade que Estados Unidos se ha comprometido a no imponer aranceles adicionales a los productos chinos.

Xinhua también hace hincapié en que los China y EU mantendrán las nuevas conversaciones con base “a la igualdad y el respeto muto”.

Una de las condiciones que exigía Xi para llegar a un acuerdo en las anteriores tratativas comerciales.

Durante el encuentro, Xi manifestó que “la cooperación y el diálogo son mejores que las fricciones y la confrontación”

Desea seguir manteniendo contactos frecuentes con Trump para promover unas “relaciones bilaterales estables” con China.

Según Xi, los dos países se benefician más de la cooperación,

Lo cual es un hecho que “no ha cambiado” en los últimos 40 años pese a los grandes cambios en la situación internacional.

Por su parte, Trump afirmó hoy que el diálogo con China para contener la guerra comercial está “de nuevo por buen camino” y calificó que la reunión con Xi fue “incluso mejor” de lo que él mismo podría esperar.

El encuentro deja por lo pronto la intención de ambos mandatarios de volver a acercar posturas tras la aparente ruptura de las negociaciones en mayo y el posterior intercambio de aumentos arancelarios.

La tregua deja entrever que las dos partes no aplicarán nuevas medidas que hagan empeorar la situación,

Queda por ver si ambas partes están realmente dispuestas a hacer concesiones para llegar a un acuerdo definitivo.

Por el momento, sigue sin haber acuerdo en temas como las dificultades para que las empresas estadounidenses accedan al mercado chino.

Tampoco hay una postura común en propiedad intelectual, transferencia forzada de tecnología o ciberseguridad.

Cuestiones que ambos lados deben discutir en los próximos meses.

Las tensiones entre las dos partes tienen su origen en el desequilibrio de la balanza comercial a favor de China, que exporta 419.000 millones de dólares más de lo que importa desde EEUU.