La escasez de medicamentos llegó a niveles intensos que también afecta a los pacientes de trasplantes en las unidades del IMSS.
Regeneración, 30 de septiembre de 2018.- Pacientes familiares y asociaciones médicas permanecen en alerta por la escasez de medicamentos de cáncer, pero ahora los pacientes del IMSS podrían estar en peligro por la ausencia de medicamentos postoperatorios en caso de trasplantes.
Se trata de Tacrolimus, un fármaco que ayuda a evitar infecciones y el rechazo de órganos a corto, mediano y largo plazo tras una intervención de este estilo.
Antonio Matus, un paciente que recibió un riñón hace seis meses, indicó que hace dos meses que no le dan el medicamento porque debido a la escasez, se reserva para aquellos que acaban de ser intervenidos.
El tacrolimus es un fármaco inmunosupresor usado principalmente después de trasplantes alogénicos para reducir la actividad del sistema inmunitario y así disminuir el riesgo de rechazo.
Las personas con trasplantes deben tomar medicamentos inmunosupresores de por vida, porque aun después de varios años su cuerpo puede rechazar el órgano donado.
Varias personas afectadas con la escasez, acudieron al Hospital General Regional No.1 «Carlos MacGregor Sánchez Navarro», ubicado en la Colonia Del Valle, porque les indicaron que ahí podrían proporcionarles el fármaco, pero en les informaron que hay una lista de espera de 300 pacientes.
«No nos han dado una explicación ni a pacientes ni a médicos. Y los doctores también están preocupados porque si dejamos de tomar el medicamento, sufrimos una descompensación. El riesgo más grande es que pudiéramos rechazar el órgano», afirmó.
En la semana, se dio a conocer que hay escasez en medicamentos que tratan el cáncer, uno de los más importantes, de hecho, y aunque pacientes, familiares, asociaciones civiles y hasta dependencias han presionado para que el gobierno compre los fármacos, pero siguen sin entregar los medicamentos.